Público
Público

Franc3s: "El tránsito es lo más importante, la culminación sólo trae decepción"

El trío gallego presenta en el Nasti Club de Madrid 'Campanas de fuego rosa', un disco producido por Rodrigo Caamaño (TAB) en el que inciden en su vocación ruidista

HENRIQUE MARIÑO

Galicia vivió una explosión musical en la primera década de siglo marcada por el factor geográfico: las bandas más atrevidas, originales y underground crecían como champiñones en pueblos y aldeas del bonsái atlántico, lejos de las grandes urbes, como había ocurrido décadas atrás en Vigo y A Coruña. El crooner rural Emilio José cantaba en brasileño de Quins, una parroquia de Melón con ínfulas de república independiente. Los alumnos aventajados de la nueva hornada gallega, Triángulo de Amor de Bizarro, venían de Ribeira. Sus amigos Franc3s tienen cuatro patas en Carballo (Alberto Vecino y María Costa) y dos en Vilalba (Patricia Bermúdez).

A ambas bandas se les ha comparado y las afinidades son evidentes. Sin ir más lejos, Rodrigo Caamaño, solista y guitarra de TAB, ha producido Campanas de fuego rosa (Limbo Starr), el segundo disco de Franc3s. Pero más allá de los parecidos razonables, la hipnótica propuesta de estos es decididamente amateur y pasa por el ruido, el shoegaze, el romanticismo y la escritura automática, macabra y surrealista de Alberto, que lleva la voz cantante del grupo.

Después de contar con la colaboración de Los Planetas y Klaus & Kinski en su alabado debut, producido por Fino Oyonarte, ahora han vuelto a recibir los parabienes de la crítica y de las publicaciones especializadas, que han incluido al trío gallego en sus listas de 2012. Después de estrenarlo en casa y pasearlo por Radio 3, este sábado lo presentan en la sala Nasti de Madrid.

¿Cómo han afrontado el temido segundo elepé?

Pues lo hemos afrontado como si fuera un tramo más del camino que estamos inventando, y que no sabemos hacia dónde va. Básicamente hemos hecho lo que nos ha dado la gana, al igual que hicimos en el primero y al igual que haremos en el tercero.

Los conocedores de su discografía asistirán a la enésima vuelca de tuerca de algunas canciones, que se vienen repitiendo en maquetas y epés, pero con una lectura diferente.

Si los discos son como tramos, las canciones son los pasos que los componen. Por eso no queremos saltarnos ninguno, para que los que nos escuchen puedan descubrir nuestro mundo. Y ese mundo no está gobernado ni por el espacio ni por el tiempo, así que en realidad no hay canciones más antiguas que otras. Y sí, muchas están cambiadas con respecto a cuando las maquetamos, simplemente porque nos encanta el cambio. El cambio es lo que hace que la vida sea interesante.

¿Se han sentido más solos sin Erik, Florent y los demás colaboradores del anterior álbum?

Siempre hemos creído que debíamos estar solos, ir por libre, y siempre lo hemos hecho, pero a veces te encuentras en el camino con gente con la que tienes ideas parecidas y es inevitable colaborar. De hecho, en este disco también participan en una canción Rodrigo Caamaño a la guitarra y Roberto Mallo al saxo.

Precisamente, ellos han sido los responsables de producir y grabar el disco. ¿Llegará el día que renieguen o intenten despegarse de la referencia habitual de Triángulo de Amor Bizarro?

Renegar de TAB sería como renegar de nuestros hermanos. Con respecto a despegarse de su referencia, eso es algo que no nos atañe ni tampoco nos preocupa. Porque puede que, como hermanos, hayamos crecido en un contexto parecido y hayamos recibido una educación parecida, pero creemos que los dos hemos tirado por sitios bien distintos. Nosotros siempre hemos intentado reducir, centrarnos en lo íntimo. Ellos, en cambio, crean bases rítmicas muy poderosas sobre las que construyen posteriormente. Realmente, aparte de usar distorsiones, creemos que no nos parecemos en nada. Si alguien no es capaz de realizar ese pequeño esfuerzo para darse cuenta, su valoración e interpretación de nuestra música está claro que no nos interesa.

¿Cómo un grupo de pueblo, compuesto por miembros que viven a decenas de kilómetros de distancia, logra hacerse un hueco en la escena indie sin ni siquiera saber tocar?

Nunca nos hemos apoyado en reglas ni teorías, pero una vez leímos una entrevista de Calvin Johnson en la que decía que lo más importante para que un grupo molara era 'no aprender a tocar tu instrumento', y eso sí que lo hemos intentado siempre. Y la verdad es que estamos muy orgullosos de vivir en nuestros pueblos, Carballo y Vilalba, pero eso, con sus ventajas y sus inconvenientes, no creemos que sea tan importante como el hecho de tener algo que decir o no tenerlo.

¿Tocarán algún día más de media hora?

No nos gusta tocar mucho tiempo porque como espectadores tampoco nos gustan los conciertos que duran mucho. Así, si te molan, te quedas con ganas de más. Y si no, pues tampoco te da tiempo a aburrirte demasiado. De todas formas, actualmente improvisamos bastante en la última canción y, dependiendo de cómo nos encontremos, los conciertos duran más o menos.

Hace un par de años no imaginaban lo que han logrado. ¿De qué están más orgullosos?

De lo que más orgullosos estamos y estaremos siempre es de haber conocido a Alberto Gende, que es el autor de toda la dirección artística del grupo. Alberto es un artista increíble. Cuando montamos el grupo, tuvimos claro que queríamos que él nos hiciera la portada de nuestra primera maqueta. Una noche en el pub Silfo de Carballo, luchando contra nuestra timidez, se lo propusimos. No sólo aceptó encantado, sino que desde entonces se convirtió en nuestro mejor amigo. Aprendimos muchísimo de él, tanto del arte como de la vida.

¿Su próximo reto? ¿Un sueño?

La verdad es que el tránsito es lo más importante, la culminación sólo trae decepción, así que lo único que queremos es seguir.




 

¿Te ha resultado interesante esta noticia?