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Central nuclear Iberdrola dice que Garoña "no es viable" y pide a Endesa que desista del permiso

Sánchez Galán afirma que todo el negocio nuclear se encuentra en pérdidas y no es viable con el marco actual

El presidente de Iberdrola, Ignacio Sanchéz Galán, al inicio de la Junta General de Accionistas de Iberdrola, en Bilbao. EFE/Luis Tejido

AGENCIAS

El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha asegurado que la central nuclear de Santa María de Garoña "no es viable económicamente" y ha pedido a Endesa, su socio en la sociedad Nuclenor, propietaria de la planta, que desista de su explotación.

En la junta general de accionistas de la compañía, Galán quiso ser "muy claro" sobre Garoña y la estrategia en materia nuclear de la energética y subrayó que las empresas "no hacemos política energética, lo que hacemos es distribuir energía con las normas de los países, de una manera segura y eficiente".

En respuesta a los representantes de Greenpeace y Foro contra Garoña que han acudido a la junta de accionistas, que se celebra en Bilbao, Galán ha dicho que Nuclenor, participada al 50 % por Iberdrola y Endesa, lleva varios ejercicios con "pérdidas cuantiosas" y ha añadido que espera llegar a un acuerdo con su socio para que desista de pedir la autorización para reanudar la actividad en la instalación. 

Ha señalado que fue el propio director de Nuclenor, Miguel Ángel Cortés, quien reconoció en un foro parlamentario que la instalación "no es viable económicamente" y lo cierto es, según Galán, que lleva "varios ejercicios en pérdidas muy cuantiosas".

El presidente de Iberdrola, Ignacio Sanchéz Galán, durante su intervención en la Junta General de Accionistas de Iberdrola, en Bilbao. EFE/Luis Tejido

El presidente de Iberdrola, Ignacio Sanchéz Galán, durante su intervención en la Junta General de Accionistas de Iberdrola, en Bilbao. EFE/Luis Tejido

Sánchez Galán ha relativizado los riesgos que puede suponer la planta en la actualidad, como han denunciado los representantes de los dos colectivos que han pedido el cese definitivo de actividad de Garoña, pues ya lleva cuatro años cerrada.

La central de Garoña, ubicada en el municipio burgalés de Santa María de Garoña, es la más antigua de España y lleva parada desde diciembre de 2012, cuando se desconectó de la red por sufrir deficiencias técnicas. El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) emitió recientemente un informe favorable para que pueda reanudar su actividad y ahora el Gobierno tiene hasta principios de agosto para tomar su decisión.

Fuentes de Endesa han señalado que el debate sobre el futuro de la central de Garoña se tiene en el seno del consejo de Nuclenor. "En todo lo relativo a la central de Garoña, Endesa remite a Nuclenor, como no puede ser otra manera", han explicado en la eléctrica. Por su parte, fuentes del Ministerio de Energía han dicho que este departamento no tomará una decisión sobre el futuro de la central nuclear de Garoña hasta que haya escuchado a todas las partes.

Todas en pérdidas

Respecto al resto de activos nucleares del grupo, integrado en Iberdrola Generación Nuclear, Galán consideró que se encuentran en una situación idéntica a Garoña, ya que "se encuentran en pérdidas", por lo que se puede considerar que tampoco son viables. "Ustedes no aprobarían que operáramos con centrales en pérdidas", afirmó a sus accionistas, que respondieron a las palabras de su presidente con una mayoría de aplausos.

El presidente aseguró que "los impuestos y obligaciones" que afectan a las nucleares hacen que el 50% de sus ingresos se tengan que destinar a hacer frente a esas obligaciones. Por ello, pidió "analizar el marco regulatorio y fiscal" en esta materia de cara al futuro, ya que en estas condiciones es un negocio no viable.

Además de Garoña, Iberdrola tiene participación en las centrales nucleares de Cofrentes (100%), Almaraz I (53%), Almaraz II (53%), Trillo (49%), Vandellós II (28%) y Asco II (15%).

Vista de la junta de accionistas de Iberdrola, en Bilbao. EFE/Luis Tejido

Vista de la junta de accionistas de Iberdrola, en Bilbao. EFE/Luis Tejido

En su discurso ante la junta general de accionistas, Sánchez Galán, ha reafirmado su intención de hacer del grupo energético "una compañía aún más grande y rentable", a través de una estrategia que apostó "antes que nadie" por las energías renovables.

Para respaldar estos planes de la compañía, Galán recordó los planes de inversión del grupo, revisados recientemente, que prevén alcanzar los 25.000 millones de euros en el conjunto del periodo 2016-2020. De esta cifra, en torno al 90% se destinarán a negocios regulados o con contratos a largo plazo: el 42% a redes, otro 42% a renovables y un 7% a generación regulada, destacó el presidente de la eléctrica.

Asimismo, el grupo prevé alcanzar un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 10.000 millones de euros en 2020 y situar su beneficio neto en 3.500 millones de euros al final del periodo, un 30% más que en 2016, señaló Galán.

Estas cifras, destacó el presidente permitirán ofrecer una retribución "creciente" a los accionistas que podría alcanzar entre 0,37 y 0,4 euros por acción en 2020, un 30% más que lo abonado el pasado ejercicio.

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