El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado este jueves un nuevo aumento del 40% del salario mínimo del país, resaltando que la medida es aplicable a todas las tablas salariales.

En lo que va de año se han realizado cuatro aumentos salariales (en enero, mayo, julio y el actual), lo que sitúa el salario mínimo en los 136.544 bolívares, según ha informado la agencia estatal venezolana de noticias, AVN. 

El mandatario ha anunciado también que implementará un nuevo sistema de pagos internacionales que utilizará una cesta de monedas distintas al dólar para sortear las sanciones financieras que Estados Unidos impuso a su Gobierno. 

Estados Unidos considera que el país sudamericano vive una dictadura y con el objetivo de presionar por un cambio, Trump firmó el mes pasado un decreto que prohíbe a las empresas de su país hacer negocios que permitan financiar al Gobierno venezolano o a su petrolera estatal, PDVSA.

El aumento de la base de cálculo para el cesta tícket socialista supone una subida de cuatro puntos, de 17 a 21 unidades tributarias, llegando a los 189 bolívares.

Maduro ordenó a su equipo económico gestionar los pagos que se realicen en monedas, como el yuan chino. Esto se da en respuesta a lo que considera es un bloqueo financiero que se profundizó con las medidas aplicadas por el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump.

Maduro denunció que bancos estadounidenses se han rehusado en los últimos días a recibir fondos del Gobierno venezolano cuando intentó transferir pagos a proveedores en el extranjero para importar medicinas y alimentos.

"Venezuela va a implementar un nuevo sistema de pago internacional y va a crear una canasta de monedas para liberarnos del dólar", dijo Maduro durante un discurso ante la asamblea constituyente.

Las medidas han sido publicadas horas después de que la Asamblea Nacional del país, controlada por la oposición, asegurara que los precios han aumentado en agosto un 33,8%, lo que eleva al 366,4% el nivel de inflación acumulada en lo que va de año.

Además, esta nueva medida llega en medio de una serie de críticas de otros países de América y Europa, que han acusado a su Gobierno de no respetar los principios democráticos. 

Sin ofrecer mayores detalles, el presidente también dijo que tiene previsto reunirse con titulares de bonos para discutir los próximos pagos de intereses y vencimientos de Caracas.