El Parlamento Europeo ha otorgado este miércoles el premio Sájarov a la Libertad de Conciencia del año 2021 al líder opositor ruso y abogado anticorrupción Alexéi Navalni, uno de los grandes oponentes políticos de Vladimir Putin, que lleva en la cárcel desde febrero de este año. 

Este premio lo entrega cada año la institución en reconocimiento a la lucha por los Derechos Humanos. Y, en esta ocasión, la Eurocámara ha destacado el "gran valor" de Navalni para reestablecer la libertad de elección de los rusos y sus años de trabajo en favor de los Derecho Humanos y las libertades. 

"Esto le ha costado su libertad y casi su vida", ha apuntado la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Heidi Hautala, quien ha exigido en nombre de la cámara su puesta en libertad de forma inmediata. 

Navalni, de 45 años, fue condenado en febrero a dos años y medio de prisión por haber incumplido los términos de su libertad condicional. Este se encontraba en Alemania, donde se estaba recuperando tras ser envenenado con un agente químico de la clase Novichok que, según él, fue ordenado directamente por el presidente de Rusia, Vladimir Putin.

Se encuentra en una cárcel de la región de Vladímir, a unos 200 kilómetros de Moscú. Ha denunciado en varias ocasiones que no se le proporcionan cuidados médicos adecuados, motivo por el cual, el pasado mes de abril, estuvo en huelga de hambre durante 23 días.

Las elecciones a la alcaldía y sus reformas anticorrupción

Navalni, reconocido —y galardonado— por su activismo político, logró, durante las elecciones parlamentarias de 2011, organizar  las mayores protestas antigubernamentales, desde la caída de la URSS, al grito de guerra "Rusia sin Putin". Y, en 2012, se presentó a la Alcaldía de Moscú logrando casi un tercio de los votos.

Desde su posición, que supuso un hito sin precedentes para la oposición extraparlamentaria, logró promover una serie de reformas anticorrupción. 

Además, ha sacado, en numerosas ocasiones, información controvertida de los aliados del Kremlin a través de redes sociales lejos del alcance de la censura. Con el tiempo, el líder de la oposición comenzó a suponer una amenaza y ha sido condenado a sendas penas de cárcel por presuntos delitos económicos, que le inhabilitaron como candidato al Kremlin, y ha sido atacado en varias ocasiones. 

En 2019 fue detenido y acusado de convocar una manifestación ilegal para protestar contra el rechazo de las autoridades rusas a inscribir a candidatos no oficialistas en elecciones locales. Y, además, recibió una candidatura al premio Sájarov que no ha logrado hasta este año, en el que ha competido con un colectivo de mujeres afganas en defensa de los derechos humanos y la igualdad, y con la expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez