Público
Público

El PSOE se vuelve a enzarzar con Catalunya... para proponer lo mismo

Los socialistas ofrecerán reconocer y blindar la singularidad, la lengua y la cultura catalana en la reforma de la Constitución

Pedro Sánchez, secretario general del PSOE . EFE

MANUEL SÁNCHEZ

MADRID.- Es más de lo mismo, pero cuando el tema territorial y Catalunya rozan la piel del PSOE, se eriza. Que se incluyeran las palabras “pacto político con Catalunya” en el documento de 18 páginas donde se relataban las prioridades programáticas socialistas si llega al Gobierno, provocó una pequeña tormenta interna, pero que amainó en un día, por mucho que lo celebrase el PSC como un avance.

Óscar López se encargó de advertir por la mañana en TVE de que el “pacto político con Catalunya” se tiene que dar en el marco de un nuevo Estatut y siempre dentro de las normas constitucionales. Y, por si quedaban más dudas, Sánchez indicó el martes que la oferta de acuerdo con Catalunya se ciñe concretamente a los contenidos de la Declaración de Granada que aprobó por unanimidad todo el PSOE y que siempre se hará de acuerdo con la Carta Magna.

El PSOE lo que más se atreve a ofrecer es a recoger o blindar en la Constitución la singularidad de Catalunya, su lengua, su cultura y sus derechos históricos, así como admitir las relaciones bilaterales, de la que gozan todas las autonomías del 151. Eso ya se dice en la Declaración de Granada. Y todo siempre dentro de la reforma Constitucional y un nuevo Estatut.

No obstante, el solo anuncio del pacto con Catalunya provocó la inmediata advertencia del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garcia Page, para avisar de que el PSOE tiene fijada una posición consensuada sobre el tema territorial y que espera que no se mueva de ella. En este discurso, le acompañaron varios dirigentes territoriales andaluces.

Sánchez, no obstante, lo que quiere intentar es ir un paso más allá en busca de abrir un proceso de negociación que ya se verá hasta dónde llega y de dar un mensaje de que se atreve a desbloquear la situación y acabar con el inmovilismo frente al ya llamado “problema catalán”.

El “melón” no se ha abierto por casualidad, y el dirigente socialista reconoció en el Foro de El Mundo que tiene perspectivas de crecer electoralmente por Catalunya, donde hace apenas ocho años el PSC logró 25 diputados. Por lo tanto, busca un guiño cómplice, que no altere a los suyos pero que pueda ser reconocible en la sociedad catalana. El líder del PSC, Miquel Iceta, lo compró desde el primer minuto y celebró la valentía de Sánchez.

Sin embargo, los equilibrios internos socialistas son difíciles y, de momento, el PSOE se ha vuelto a enfrascar en un debate que algunos dirigentes creen que es el que menos le interesa, sobre todo porque en Andalucía tampoco las cosas pintan bien y es el primer granero de votos socialistas.

Fuentes de la dirección federal indican que todo se ha magnificado mucho, y que el PSOE se mantiene en sus posiciones de la Declaración de Granada, que la apoyó el PSC y que dicen que es más ambiciosa de lo que se ha trasladado. Y eso es lo que quieren contar ahora.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias