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La izquierda europea quiere que la UE juegue un importante papel en el conflicto catalán

Bruselas subraya su "confianza" en todas las fuerzas políticas que están trabajando por una solución "en el marco de la Constitución española"

Los eurodiputados Marina Albiol, Gabi Zimmer y Miguel Urban.

BEATRIZ RÍOS

La izquierda europea quiere que la UE juegue un importante papel en el conflicto catalán, sí, pero reconoce que a día de hoy no puede actuar como mediador pues se ha mostrado claramente en favor de una de las partes, el gobierno de Mariano Rajoy. Así lo han expresado este miércoles la presidenta del Grupo de la Izquierda Unitaria Europea (GUE, según sus siglas en inglés) y la Izquierda Verde Nórdica en el Parlamento Europeo, Gabi Zimmer, y los portavoces en la Eurocámara de Podemos, Miguel Urbán, e Izquierda Unida, Marina Albiol.

Los representantes del GUE celebran la intervención de ayer de Carles Puigdemont ante el Parlament en la que el presidente de la Generalitat proclamó la independencia, para después suspenderla y llamar al diálogo. Ese diálogo, entienden, debe ser la vía hacia una solución política al conflicto. “Seles vuelve a poner sobre la mesa una oportunidad y nos gustaría que el Estado central estuviera a la altura”, explica Marina Albiol. Pero ese diálogo, advierte Miguel Urbán, no puede ser en abstracto. El portavoz de Podemos pide específicamente poner sobre la mesa de negociación el derecho a decidir de los catalanes. Porque “el 1 de octubre el pueblo catalán mostró de forma decidida su anhelo de votar”, y a eso, entiende Urbán, “hay quedarle una expresión política o solo empeoraremos el problema”.

Pero por el momento, la izquierda europea no ve señales de que el gobierno de Mariano Rajoy esté dispuesto a dialogar y critica la respuesta represiva del Estado español contra los movimientos independentistas. Denuncia además la falta de una respuesta contundente ante el ascenso de una extrema derecha cuyo odio, asegura Albiol, “está alimentando el Estado español”.

Marina Albiol: "Cualquier medida excepcional sería un ataque a la democracia”

Marina Albiol pide al Gobierno que evite utilizar el artículo 155 o el 116 a toda costa pues, “cualquier medida excepcional sería un ataque a la democracia”. También la presidenta, Gabi Zimmer, pide a Rajoy que evite esta decisión pues solo “echaría más leña al fuego”. Urbán suscribe y critica con dureza la actitud del gobierno de Rajoy, y a “un Partido Popular que camina a convertirse en el Erdogán del sur de Europa”. Alude a lo que considera es un giro autoritario sin precedentes y una recuperación del “franquismo sociológico”. Albiol recuerda no ya la violencia en las calles el pasado 1 de octubre sino las detenciones de miembros del Govern, el cierre de imprentas, la confiscación de material electoral… Urban se refiere a las palabras de Pablo Casado que advertía a Puigdemont de acabar como Lluís Companys si seguía adelante con la independencia, y sus posteriores declaraciones pidiendo la ilegalización de partidos independentistas. “Eso ya pasó en este país y fue hace cuarenta años”, denuncia el portavoz de Podemos.

La falta de neutralidad de la UE

Comisión, Consejo y Parlamento coinciden en tres aspectos fundamentales en la cuestión catalana, el respeto al orden constitucional, la necesidad de pasar de la confrontación al diálogo y evitar el uso de la fuerza a toda costa. Sin ir más lejos, ayer el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, mandó dos mensajes capitales en su discurso ante el Comité de Regiones. A Rajoy, le recordó que “la fuerza de los argumentos es siempre mejor que el argumento de la fuerza". A Puigdemont, le pidió que respetara el orden constitucional y no tomara “una decisión que haga imposible el diálogo”. La declaración de ayer del President llama precisamente a conversar.

Pero para la Izquierda, la posición de la UE en estos meses no ha sido neutral. Primero porque ha evitado pronunciarse sobre el conflicto, que considera interno, durante meses. Segundo, porque no ha condenado la violencia con la contundencia que debiera. Y tercero, porque debe implicarse de manera activa como impulsor del diálogo.

Sin embargo, la UE “no puede ser un mediador”, entiende Gabi Zimmer, porque sencillamente no es neutral. Albiol coincide con la presidenta y asegura que, hasta ahora, la Unión se ha puesto del lado de Mariano Rajoy, a quien la Comisión expresó su apoyo y confianza explícitamente, como reacción a la celebración del referéndum.

Gabi Zimmer: "Pedimos a las instituciones que sean leales a los ciudadanos, no a los gobiernos” 

Lo cierto es que la UE, como entidad supranacional, es lo que sus Estados miembros quieren que sea, y asumir un papel de mediador entre el Estado español y el Govern implicaría un reconocimiento expreso de ambas partes como iguales. Algo que políticamente parece muy complicado. Por Zimmer insiste en que lo que están pidiendo a las instituciones es “que sean leales a los ciudadanos, no a los gobiernos” y dejen por tanto de “encenderse detrás de Rajoy”.

Miguel Urbán entiende además que cuanto más se internacionalice el conflicto, y lo está haciendo, más difícil va a ser para la UE no posicionarse. Para Urbán la cuestión es si la Unión seguirá cerrando filas en torno a “la deriva autoritaria del gobierno, que sabe que puede agravar el problema” u obligará finalmente al gobierno “a tomar una solución política al problema”. Si la solución al conflicto en Catalunya pasa por una reforma de la Constitución, Marina Albiol, portavoz de Izquierda Unida, recuerda que la UE ya impulsó una en España. “Si la UE puede promover el 135 para pagar la deuda de los bancos, también se pueden promover otras modificaciones para asegurar el derecho a decidir”, sentencia.

Sobre por dónde pasa esa solución política, la presidenta de la Izquierda Unitaria evita pronunciarse. Gabi Zimmer considera que la UE no debe tomar partido, que la configuración del orden constitucional es una decisión que corresponde a los españoles y las instituciones europeas no deben inmiscuirse, que cada pueblo, cada historia es diferente. Por eso, Zimmer insiste en que en España es necesario un “proceso de democratización” con el apoyo de la comunidad internacional, lo importante es impulsar el diálogo. Sobre el qué, deberán decidirlo los españoles.
Gabi Zimmer considera que la declaración de ayer de Carles Puigdemont es complicada, pues con la suspensión de la declaración de independencia aumenta de la presión sobre el Gobierno. “Espero que el gobierno no caiga en la trampa y no active el artículo 155”, asegura Zimmer, y “opte por el diálogo”. Miguel Urbán asegura que ayer, el President cumplió con su declaración con las demandas de la UE. Echó el freno. Por eso, entiende Urbán, “la pelota está ahora en el tejado del gobierno”, al menos para la Unión Europea.

"Una solución dentro del marco de la Constitución"

Por su parte,  la Comisión Europea ha mostrado su "confianza" en todas las fuerzas políticas que están trabajando por una solución a la situación en Catalunya "en el marco de la Constitución española", tras la declaración del presidente catalán, Carles Puigdemont, sobre la independencia. "Confiamos en las instituciones españolas; en el presidente (del Gobierno español, Mariano) Rajoy, con quien el presidente (de la CE, Jean-Claude) Juncker está en constante contacto", ha señalado el vicepresidente Valdis Dombrovskis en una rueda de prensa. "Y en todas las fuerzas políticas que están trabajando por una solución dentro del marco de la Constitución española", añadió.

El Colegio de comisarios europeos abordó en su reunión semanal de este miércoles "brevemente" la situación en Catalunya, según ha indicado Dombrovskis. "La Comisión sigue de cerca la situación en España y reitera su llamada anterior al respeto del orden constitucional español", insistió.

El vicepresidente letón de la Comisión, responsable del Euro y el Diálogo Social, ha recalcado además que la UE "apoya los esfuerzos por superar la división y la fragmentación, por mostrar unidad y respeto a la Constitución española".

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