Público
Público

Golpe a Catalunya Puigdemont: "Nos hemos de conjurar para defender nuestras instituciones"

El President de la Generalitat pide que se reúna el pleno del Parlament para decidir las respuestas a dar a la aplicación del artículo 155. La Presidenta Carme Forcadell asegura que diputadas y diputados no permitirán que la cámara legislativa catalana pierda sus funciones

El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, durante su mensaje de respuesta a las medidas de suspensión del autogobierno de Catalunya / EFE

"Silencio o represión". Son las respuestas que sabe dar el gobierno de Mariano Rajoy a las propuestas de diálogo de la Generalitat. Esta es la percepción del president Carles Puigdemont, expresada en un conciso y contundente mensaje institucional de réplica a las medidas anunciadas por el presidente del gobierno español.

Una declaración en la que ha manifestado el propósito de no ceder ante los planes del Ejecutivo de Madrid. En el mismo sentido se ha pronunciado la presidenta del Parlament de Catalunya, Carme Forcadell.

La palabra "golpe" ha estado presente en casi todas las declaraciones de reacción de los políticos catalanes contrarios a la aplicación del artículo 155 a la hora de calificar las medidas aprobadas por el Ejecutivo del PP.

El Consejo de Ministros, según Puigdemont, ha dado un "verdadero portazo" al clamor popular que reitera la necesidad de hablar, y  ha anunciado "una serie de medidas y de ceses que, directamente, representan la liquidación del autogobierno de Catalunya ". "Lo que los catalanes decidieron en las urnas el gobierno español lo anula los despachos", ha denunciado el President.

"El gobierno español, con el apoyo del partido socialista y de Ciudadanos, ha emprendido el peor ataque contra las instituciones y al pueblo de Catalunya desde los decretos del dictador militar Francisco Franco aboliendo la Generalitat de Catalunya". "Se ha autoproclamado de forma ilegítima como representante de la voluntad de los catalanes", ha explicado el President después de manifestar su preocupación por el hecho de ver despreciada la voluntad popular expresada en las elecciones del 27 de septiembre de 2015 ".

"Sin pasar por las urnas, con un apoyo escaso y en contra de la voluntad de la mayoría, el gobierno de Mariano Rajoy quiere nombrar un directorio para  teledirigir desde Madrid la vida de Catalunya", ha constatado.

"Y no es la primera vez" ha recordado que, "también con el apoyo del rey, las instituciones catalanas reciben un golpe por parte del Estado español para rebajarlas, reorientarlas o directamente suprimirlas" , insistiendo en que la Generalitat existía mucho antes de la aprobación de la actual constitución española, una institución defendida "con la fuerza de la gente y la democracia".

"La humillación que pretende aplicar el Gobierno español erigiéndose en tutor de toda la vida pública catalana", resulta inaceptable y "se sitúa fuera del Estado de derecho", porque pretende imponer una forma de gobierno no elegida por los ciudadanos y sin una mayoría parlamentaria que la avale ", ha explicado el presidente, que ha vuelto a recordar la violencia utilizada el día 1 de octubre contra ciudadanos pacíficos, el encarcelamiento de "dos personas de paz que no han cometido ningún crimen", la persecución ideológica y el "estímulo irresponsable de la inestabilidad económica".

Puigdemont ha calificado de irresponsables a los que hoy quieren gobernar a los catalanes y ha hecho un llamamiento a la ciudadanía: "Nos tenemos que conjurar para volver a defender nuestras instituciones como hemos hecho siempre, de manera pacífica y civilizada, pero cargados de dignidad y de razones ". "Pediré al Parlamento que fije la convocatoria de una sesión plenaria donde los representantes de la soberanía ciudadana, los elegidos por los votos de los ciudadanos, debatamos y decidamos sobre el intento de liquidar nuestro autogobierno y nuestra democracia, y actuemos en consecuencia", ha anunciado.

El presidente ha dedicado una parte de su mensaje a la ciudadanía española y europea, en castellano e inglés, advirtiendo a los demócratas que el ataque contra Catalunya abre la puerta a otros del mismo tipo en cualquier lugar y que si los valores europeos se ponen en peligro en Catalunya también lo estarán en el resto de Europa. "Decidir democráticamente el futuro de una nación no es ningún crimen", ha concluído, asegurando que Catalunya seguirá defendiendo lo mismo que el resto de pueblos europeos: la protección de la carta de derechos fundamentales.


"No daremos ni un paso atrás", promete Forcadell

La presidenta del Parlament también se ha visto obligada a salir en defensa de la institución que representa, ante el panorama de actividad parlamentaria que ha dibujado para Catalunya Mariano Rajoy.

El presidente del Gobierno "con una irresponsabilidad política enorme, ha traspasado todos los límites" con el anuncio de un "golpe de Estado de facto", ha afirmado Carme Forcadell en otro mensaje. Las medidas anunciadas, según ella, "caen en la más flagrante inconstitucionalidad". "No las acompañan ni la legalidad, ni la legitimidad política", ni cuentan "con el apoyo de la mayoría de los catalanes".

La presidenta del Parlament, acompanyada de membres de la Mesa, durant el discurs institucional de resposta a l'anunci d'aplicació de l'article 155 / EFE

La presidenta del Parlament, acompañada de miembros de la Mesa, durante el discurso institucional de respuesta al anuncio de aplicación del artículo 155 / EFE

La presidenta ha señalado que se ha dado un "golpe a la democracia" en la Europa del siglo XXI con el objetivo de "acabar con un gobierno elegido democráticamente", un "golpe autoritario" por parte de un Estado miembro de la Unión Europea, que quiere "acabar con las atribuciones del Parlament y de sus representantes".

La presidenta, que ha pronunciado estas palabras acompañada de cuatro miembros de la Mesa, ha recordado que desde hace siete años el Estatut d'Autonomia que rige la vida política catalana no es el que votó la ciudadanía. "Ahora nos quieren quitar el Parlament que votamos", ha denunciado.

Rajoy quiere que el Parlament, ha dicho, "deje de ser un parlamento democrático" impidiendo debates de investidura o el ejercicio de sus funciones de control". "No lo vamos a permitir", ha asegurado la presidenta de la cámara catalana." No daremos ni un paso atrás", ha prometido, porque los catalanes nos eligieron democráticamente como" legítimos representantes ". "Atacando los diputados, ataca a toda la ciudadanía, piense como piense ", ha insistido.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias