Rodrigo Rato, exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional y exvicepresidente del Gobierno de José María Aznar, utilizó su presidencia en Bankia para cobrar unas presuntas 'mordidas' de 835.000 euros a costa del banco entre los años 2010 y 2011. Esa es la conclusión de la Fiscalía, que sostiene que Rato creó con personas de su confianza un "auténtico grupo de presión dentro de la entidad financiera, actuando como 'núcleo duro' a las órdenes y en beneficio último de Rodrigo Rato Figaredo".

La Fiscalía Anticorrupción ha remitido un escrito al magistrado Antonio Serrano-Arnal con estas conclusiones y en el que solicita que concluya la investigación relativa a los contratos de publicidad de Bankia y dicte auto de procesamiento contra Rodrigo Rato y 15 personas más, entre altos cargos su confianza en la época de su presidencia de Caja Madrid-Bankia, y los directivos de empresas privadas que pagaron estas comisiones.

El magistrado, por su parte, responde a la fiscal que aunque la instrucción de esta pieza se encuentra prácticamente concluida, el delito de corrupción en los negocios se encuentra íntimamente relacionado con la comisión de otros delitos contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales, cuya instrucción continúa en distintas partes de esta investigación, lo que hace aconsejable que se juzgue de forma conjunta.

La Fiscalía cita a 15 personas físicas sobre las que va a solicitar el procesamiento, así como a dos jurídicas que son las empresas que pagaron las comisiones (Publicis Comunicación y Zenith Media).

A la cabeza de las personas que la Fiscalía solicitará que se sienten en el banquillo de los acusados se encuentra Rodrigo Rato, el exsecretario de Estado de Hacienda con el PP José Manuel Fernández Norniella -a quien nombró vicepresidente y consejero de la entidad-, su abogado Domingo Plazas, así como el exresponsable de Comunicación externa de Caja Madrid  Miguel Robledo Gómez, y su colaboradora Beatriz Colomer.

Se da la circunstancia de que la fiscal no incluye a Pilar Trucios, que era la responsable de Comunicación de la entidad, pero sí pide sentar en el banquillo a la exsecretaria personal de Rato Teresa Arellano, cuando fue nombrada coordinadora y sustituta de Trucios en enero de 2012  y el escrito del ministerio público se centra en las comisiones pagadas entre 2010 y 2011. Rato dimitió en mayo de 2012 y posteriormente la entidad tuvo que ser rescatada con dinero público.

La investigación judicial se centra en el pago de comisiones a la empresa de Rato Kradonara por valor de 835.000 euros. Estas supuestas 'mordidas' estaban enmascaradas como prestación de servicios a la entidad financiera de 474.000 euros en el ejercicio de 2010 y 360.608 en 2011.

En el escrito, fechado el pasado 4 de junio, la fiscal del caso solicita que se abra procedimiento abreviado, lo que permite cerrar la instrucción y dictar auto de procesamiento para que el ministerio público pueda pedir penas y que se abra juicio oral contra los acusados.

La fiscal Elena Lorente solicita que el titular del Juzgado de Instrucción 31 de Madrid continúe el trámite de procedimiento abreviado ─previo paso a la apertura de juicio oral─ de esta pieza separada de la investigación sobre el presunto origen ilícito del patrimonio de Rato, por los contratos de publicidad firmados entre 2010 y 2011 y de los que cobró "comisiones carentes de justificación" a través de su sociedad Kradonara.

Según su relato de los hechos, el exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) se sirvió "de íntimos colaboradores" tales como Miguel Ángel Montero, a quien introdujo en la entidad como asesor externo, su secretaria personal Teresa Arellano y su amigo y "hombre de confianza" José Manuel Fernández Norniella, entonces vicepresidente y consejero de Bankia. "Todos ellos constituyeron un auténtico grupo de presión dentro de la entidad financiera actuando como núcleo duro a las órdenes y en beneficio último de Rodrigo Rato", explica la fiscal en su escrito.