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Un juez absuelve a tres acusados de agredir a la Policía y dice que la versión de los agentes "responde muy poco a la realidad"

Los tres jóvenes fueron acusados de atentado y lesiones a la autoridad tras la manifestación del colectivo 'Parados en movimiento' que fue dispersada por los antidisturbios "fuera del protocolo de disolución de una manifestación". El magistrado abre la puerta a las defensas a acusar por falso testimonio a uno de los agentes

La policía disolvió la manifetsación del 2 de febrero de 2014 en Valladolidad "fuera del protolo de disolución de una manifestación"

PÚBLICO / AGENCIAS

El Juzgado de lo Penal número 3 de Valladolid absolvió ayer, jueves, a los tres jóvenes acusados de delitos de atentado y faltas de lesiones sobre agentes de la Policía Nacional durante los incidentes registrados en febrero de 2014 ante las puertas del restaurante La Parrilla de San Lorenzo, al término de una manifestación convocada por Parados en Movimiento y que coincidió con una Convención Nacional del PP.

Lo llamativo del caso es que tras el visionado de los vídeos de los supuestos incidentes y las declaraciones de los acusados y de los agentes lesionados, dos de ellos por videoconferencia, el propio fiscal ha acordado retirar los cargos contra dos de los imputados, Juan H.B. y Luis Miguel H.P, al no apreciar actuación delictiva alguna por su parte, y en cambio ha mantenido su petición de nueve meses de prisión para Javier V.F. por delito de atentado.

Sin embargo, el titular del juzgado Miguel Ángel Martín Maestro, antes de la conclusión del juicio, ha anunciado 'in voce' su decisión no sólo de absolver a los dos primeros, algo lógico tras la retirada de cargos contra ellos, sino también del tercer imputado al no considerar los hechos delictivos. Martín Maestro, tal y como informa Diario de Valladolid, calificó la actuación de la Unidad de Intervención de la Policía (UIP), "fuera del protocolo de disolución de una manifestación" y aseguró que las grabaciones de vídeo –se proyectaron media docena– demuestran de forma "palmaria" y "evidente" que lo recogido por la Policía en sus atestados "responde muy poco a la realidad".

Asimismo, el magistrado también ha abierto la puerta a las defensas a acusar por falso testimonio a uno de los agentes. La versión policial señalaba también que uno de los acusados había llegado a empuñar la pistola de uno de los policías antes de ser finalmente reducido.

El letrado de Juan H.P, Pablo Gerbolés, se ha felicitado por la decisión del juez pero ha expresado su "enojo" por el hecho de que los tres jóvenes (un cuarto, Javier G.B, no ha comparecido y está declarado en rebeldía) "han tenido que soportar este proceso durante cuatro años y ocho mil declaraciones para quedar ahora absueltos porque las pruebas son palmarias de que allí no se produjo nada de lo que la policía dice que ocurrió".

El defensor entiende que las denuncias de los agentes de la Policía Nacional no son más que una "coartada" de éstos para justificar las numerosas lesiones que allí sufrieron algunos de los manifestantes, y todo ello en un exceso de celo y saltándose los protocolos de actuación, como así apunta que ha reconocido el propio juez.

Los hechos que han concluido en anuncio de sentencia absolutoria se remontan al mediodía del 2 de febrero de 2014, al término de una manifestación convocada por Parados en Movimiento que culminó sin incidentes en la Plaza Mayor y tras la cual un grupo de entre 60 y 80 personas comenzó a transitar por calles adyacentes con una gran pancarta y coreando consignas.

Fue al llegar a la calle San Lorenzo, ante las puertas de La Parrilla, donde se encontraban comiendo militantes del PP una vez concluida la Convención Nacional de este partido celebrada en el Centro Cultural Miguel Delibes, cuando, según denunció la Policía Nacional, se produjeron los incidentes entre los imputados y varios agentes que formaban parte del operativo de seguridad dispuesto a las puertas de dicho establecimiento.

La acusación pública atribuía a cada uno de los imputados distintas actitudes, amenazas de muerte y comportamientos violentos en el momento de ser identificados y requeridos por la policía para que depusieran su actitud, a resultas de lo cual tres de los agentes resultaron con diversas lesiones, e incluso imputaba a uno de ellos haber llegado a empuñar la pistola de uno de los policías antes de ser finalmente reducido.

Con carácter previo a la celebración del juicio, que se ha desarrollado bajo un fuerte dispositivo policial, medio centenar de personas se ha concentrado a las puertas de los juzgados para solidarizarse con los acusados y exigir una sentencia absolutoria, como así ha ocurrido finalmente. Los concentrados se ha apostado tras una pancarta que han instalado en el suelo en la que se podía leer 'Paremos la criminalización de la protesta social'.

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