Público
Público

Maltrato animal La tauromaquia se desangra

Un estudio de la evolución de la tauromaquia desde el año 2007 al 2017 revela que cada vez hay menos espectáculos taurinos. Sin embargo, hay contradicciones entre los datos aportados por Ministerio de Cultura y las asociaciones taurinas. Desde el Estado señalan que acontecen cerca de 1.553 espectáculos anuales frente a los 855 de las estadísticas taurinas.

Imagen de archivo de una corrida de toros. EUROPA PRESS/Pablo Blázquez Domínguez

Alejandro Tena

La tauromaquia sigue en pleno descenso. Así lo reflejan los datos y así lo constata el último informe de la AVATMA (Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia y del Maltrato Animal) apoyado en las cifras estadísticas del antiguo Ministerio de Educación, Cultura y Deporte que recogen la evolución de los espectáculos taurinos desde 2007 hasta el 2017.

Según los datos facilitados por el Estado, la tauromaquia desciende, pero de forma "leve" y "suave". Del 2016 al 2017, el porcentaje de estos festejos se redujo un 2,9% frente al descenso del 8% que vimos en la interanual del 2015-2016. Pero ¿Por qué se ha frenado la tendencia del descenso de la tauromaquia en España?

Para la AVATMA todo se debe a "las facilidades que dan los ayuntamientos, diputaciones y CCAA" a la industria del toro en materia económica. Un buen ejemplo es el canon taurino de la plaza de toros de Algeciras que ha pasado de ser de 50.000 a 3.000 euros. Más llamativo es el caso de Ciudad Real, donde la tarifa asciende a unos ridículos 100 euros.

2.098 espectáculos taurinos anuales menos respecto a 2007

Pese a ello, las cifras no hacen otra cosa que revelar el detrimento de apoyos sociales que experimenta la tauromaquia: de 3.651 festejos en plaza en el año 2007 pasamos a los 1553 del 2017. Dicho de otra forma, 2.098 espectáculos menos.

De estos datos, no se debe pasar por alto que los tipos de festejos que menos descienden no son los que acontecen en grandes plazas con figuras destacadas de la industria. Más bien lo contrario. Hablamos, por tanto, de que las audiencias que más resisten a este descenso progresivo de la tauromaquia son las de los festejos de peor calidad.

Si se concreta más, el 78,8% de los festejos se celebran en plazas de tercera y cuarta categoría donde los costes son muy bajos y las expectativas del público no son demasiado elevadas. Para la Asociación de Veterinarios Abolicionistas, este dato desmiente el tópico del aficionado taurino que paga precios caros por espectáculos con grandes figuras de la tauromaquia. 

Además, esta asociación animalista destaca que el anterior Ministerio de Cultura utiliza las cifras de estos espectáculos de menor calidad, que abarcan desde los encierros a las sueltas de reses en las plazas, para agrandar los datos de apoyo a la tauromaquia de la sociedad española.

¿Aumentan los profesionales taurinos?

El informe de AVATMA pone encima de la mesa el creciente compromiso social por la defensa de los derechos de los animales. Esos datos que confirman el ocaso de la tauromaquia, contrastan por otro lado con el aumento de la cifra de profesionales taurinos: 3.562 personas más en 2017 que en 2007. Pero ¿cómo es posible?

Desde esta asociación por los derechos de los toros apuntan que las estadísticas "no se limpian". Es decir, no se actualizan las cifras de aquellos que dejan de dedicarse a la industria taurina ya sea por jubilación o por defunción, pero si se que se suman las nuevas incorporaciones. Por ello, exigen al Estado que actualice y aclare estos datos.

Un buen ejemplo de lo contradictorio de estos datos está en la elevada cifra de mozos de espada que hay en España (3.332). Partiendo de la base de que estos participan en uno de los eventos taurinos menos común, y entiendo que "la mayoría son copados por poco más de 30 toreros y 20 novilleros", esta cifra se plantea cuanto menos dudosa.

Por otra parte, el documento revela que cada vez menos personas se forman para desarrollar profesiones vinculadas a la tauromaquia. Tanto es así, que descienden los alumnos de las escuelas agraciadas con dinero público, pero también los de los grandes centros privados en manos de toreros y ex toreros de renombre. Actualmente, en España hay 58 escuelas.

Plaza de toros. /EUROPA PRESS

Plaza de toros. /EUROPA PRESS

Las cifras no casan

Si prestamos atención a las cifras aportadas por el ministerio de Cultura y las contrastamos con los datos que facilitan las asociaciones taurinas, la primera evidencia será que estas no coinciden. La segunda evidencia plantea un dilema: o el Estado agranda las estadísticas relacionadas con la tauromaquia, o las asociaciones taurinas las adelgazan.

Según el Ministerio de Cultura, los festejos por cosos taurinos suman 1.553, lo que permite estimar -poniendo una media de seis toros por festejo- que habrían muerto 9.318 toros. Una cifra que se presenta algo elevada si se compara con la cifra facilitada por las estadísticas taurinas: 855 festejos y cerca de 9.318 animales asesinados.

Por estas contradicciones constantes, la AVATMA exige al Ministerio de Cultura que realice un "informe real de la cantidad de subvenciones que recibe" la industria taurina y pide explicaciones sobre "cómo es posible que el sector siga subsistiendo".

"Consideramos que ha llegado el momento de que se empiece a legislar para eliminar su consideración de Patrimonio Cultural como paso previo a su abolición", zanja la asociación contra la tauromaquia.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias