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Hospital comarcal Verín acoge un entierro simbólico para protestar contra el cierre de su paritorio

Vecinos y usuarios del hospital de la localidad ourensana piden en una esquela una pronta "resurrección" del servicio.

Trabajadores y usuarios del Hospital de Verín, en un entierro simbólico contra el cierre del paritorio. / EFE

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Familias del ayuntamiento de Verín (Orense) y usuarios del hospital han celebrado este sábado un entierro simbólico del paritorio, del que se ha anunciado su cierre, y en una esquela han expresado su confianza en que se atienda su protesta y por haya una pronta "resurrección" del servicio.

La singular comitiva estuvo encabezada por un coche fúnebre que portaba el ataúd y las plañideras y que trasladó al cadáver "hasta el hospital” de Verín donde procedieron a “los responsos” e “invocaron la resurrección, que es lo que busca "toda la población de Verín”, ha explicado la integrante de la plataforma sanitaria, Yolanda Domínguez.

Durante el recorrido, desde la Plaza Mayor de Verín hasta el hospital comarcal, más de mil personas corearon gritos de “Verín non se pecha” (Verín no se cierra) así como de “dimisión”, en alusión al gerente de la Estrutura Organizativa de Xestión Integrada (EOXI) de Ourense, Verín y O Barco, Félix Rubial; el consejero de Sanidad, Jesús Vázquez Almuíña, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, como máximo representante del Gobierno gallego.

Trabajadores y usuarios defienden que se mantenga el servicio de partos que consideran fundamental.

La secretaria de la comisión delegada del hospital ha destacado la implicación de toda la ciudadanía de la comarca contra la decisión de la gerencia de suprimir el paritorio en el hospital y ha resaltado las “ganas” de “mantener esto vivo”.

De hecho, este lunes está convocada una reunión de las plataformas sanitarias de toda Galicia en Verín y, especialmente, donde hay hospitales comarcarles, puesto que según Domínguez: "Hoy nos tocó a nosotros” pero “mañana” puede ocurrirle a otras localidades.

Una usuaria del hospital, Raquel Adolfo, que está embarazada de cinco meses y que se ve por tanto afectada por la supresión del paritorio, ha trasladado a Efe su “frustración” tras recordar que en estos 25 años de servicio “nunca” hubo “ningún” problema.

A este respecto, ha advertido de que el problema ya no es sólo que cierren este servicio sino las dificultades por tener que desplazarse en algún caso distancias de “hora y media” para llegar al “hospital de referencia”.

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