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Ahora también, juguetes eróticos para veganos

En España están surgiendo tiendas eróticas para veganos con productos 'hot 'que no provienen de agresiones a los animales ni nada que provenga de ellos 

Imagen de un lote de juguetes eróticos para veganos. Javier Gamonal.

LUCIA MARTÍN

Si hace años surgieron las boutiques eróticas para mujeres, ¿por qué no una tienda enfocada a veganos? En España abrió hace un año una tienda online de estas características. En sus productos hot, nada de agresiones a los animales ni nada que provenga de ellos. Pero tampoco juguetes machistas. ¿Su público? Mujeres y muchos transexuales.

Primero fueron las boutiques eróticas solo para chicas, como la primera que abrió en Madrid, Los Placeres de Lola. Luego, con el auge de internet, llegaron las jugueterías online: porque no todo el mundo tenía una boutique hot a la vuelta de la esquina en su pueblo de Soria, por ejemplo, y además, porque no a todos les apetecía dejarse caer por una tienda física… Pero Ohlilith es una vuelta de tuerca en el mundo de la juguetería erótica, como un doble salto mortal: somos veganos y además, nos definimos como feministas. Las cosas claras desde el principio, para que nadie se equivoque. De hecho hablan siempre usando el sujeto femenino, aunque el interlocutor sea masculino.

Esta eroteca online vio la luz hace aproximadamente un año: la fundaron una diseñadora y un fotógrafo, Berenice Riu y Javier Gamonal. Ambos veganos, por supuesto. “Toda la gente que trabaja en el equipo, somos cuatro, lo es. No es que sea condición sine qua non, pero creemos que así entienden mejor el mensaje y el producto”, comenta Riu.

¿Crearon un negocio para veganos por serlo ellos? No: “No viene por ser vegana, sino por ser compradora (mujer) de juguetes eróticos. La experiencia de comprarlos no me era agradable, veía juguetes que eran muy machistas, agresivos, la estética no me acababa de gustar”, explica Riu. “Además se da la paradoja de que el 80% de los juguetes está pensado para la mujer pero la mayor parte de los compradores son hombres”, añade Gamonal.

Así, queriendo modificar esa experiencia de compra, surgió Ohlilith. Y hasta el nombre está meditado: no, Eva no fue la primera mujer de Adán, quédense muertos. Adán ya era separado, para que luego digan que la Biblia no es actual.. La primera fue Lilith pero como era una fémina díscola, no tuvo tan “buena prensa” como Eva a lo largo de la Historia: de hecho Lilith abandonó el paraíso y dejó con un palmo en las narices a Adán.

Imagen de un lote de juguetes eróticos para veganos. Javier Gamonal.

Imagen de un lote de juguetes eróticos para veganos. Javier Gamonal.

¿Razones? Entre otras que nunca, según recogen algunos textos, encontraron la paz juntos porque cuando él quería acostarse con ella en la posición del misionero (por supuesto), ella se negaba. “¿Por qué he de recostarme debajo de ti?”. Considerando nuestra sociedad heteropatriarcal y que la Iglesia no es especialmente igualitaria, entenderán que lo de Lilith se sepa poco…

Pero volvamos con nuestra eroteca feminista y vegana. Por lo pronto, no diferencian los juguetes por género, esto para chicas y esto para chicos, como si fuese un catálogo de juguetes infantil. Y eso hace que parte de su público sea transexual. “Deconstruimos esa polarización del género, no nos parece apropiada”, dicen sus fundadores.

Si entre sus compradores hay un buen porcentaje de trans, lo que sin duda brillan son las mujeres, de entre 21 y 38 años, mayoritariamente. Es la primera tienda de España, pero no de Europa, con estas características: hay alguna que otra en Alemania, por ejemplo, que sigue este concepto. En España, solo un 0,5% de la población se declara vegetariana (que no vegana, los cuales posiblemente serán menos). En el Reino Unido dicen serlo un 6%, y en Alemania, un 9%, según datos de la Unión Vegetariana.

Pero, ¿qué hay en una tienda erótica vegana? Pues artículos que no provienen de animales, que no han sido testados en éstos y además, saludables, buenos para el cuerpo. "Nuestro catálogo no es el que más tiene del mercado, no queremos distinguirnos por eso. Pero sí lo hacemos por no vender artículos ofensivos para las mujeres, por haberlos testados todos y porque hay muchos que son artesanales”, comenta Gamonal. En la web pueden encontrarse pinturas corporales, velas de masaje, corsets, máscaras e incluso, lencería sexy para mujeres curvies.

Imagen de un lote de juguetes eróticos para veganos. Javier Gamonal.

Imagen de un lote de juguetes eróticos para veganos. Javier Gamonal.

A., de 29 años, es compradora habitual. Conoció su existencia a través de las redes: “Me llamó mucho la atención el concepto, yo soy vegana desde hace 7 años y vegetariana desde hace 9. Me gusta explorar así que suelo comprar cosas diferentes, desde vibradores o dildos, a lubricantes, pintura corporal, lencería..

También me dejo asesorar por sus Newsletters: su web es muy friendly, con explicaciones de cada producto muy claras y muy cercanas. Lo que más me gusta es el mimo con el que preparan cada envío. Cuidan todos los detalles”, comenta. y, ¿por qué comprar en esta tienda y no en otra? “Saber que estoy comprando productos respetuosos con el medio ambiente, con los animales y con mi cuerpo multiplica el placer”, dice sonriendo. Antes había comprado en alguna que otra juguetería erótica, pero no las tenía como referencia, mientras que ahora sí, reconoce.

¿Los best sellers de la tienda? “Unos plugs anales que terminan en una colita de animal, bien de un zorro, un gatito.., éstos han tenido mucho éxito. También, los collares personalizados, tanto de calle como de sumisión y propiedad, dedicados al mundo Bdsm”, añaden.

Los productos artesanales tienen mucho tirón (están los de una artesana madrileña que, por ejemplo, hace arneses con materiales reciclados como cámaras y piñones de bicicletas) y los clásicos, como vibradores. Y, por supuesto, los condones y lubricantes veganos.

¿Precios? No vayan a pensar que más caro que lo que pueda encontrarse en otra tienda erótica: incluso los artículos de Bdsm, muchos de ellos fabricados en piel en otras boutiques, aquí son más baratos, por ser polipiel. “Muchos vienen de Alemania, no pensemos que es una polipiel baratilla, es de muy buena calidad. En Alemania hay mucho artesano porque hay mucho movimiento vegano”, finaliza Riu.

Lo vegano llega con fuerza a la moda (hay ropa interior, por ejemplo, hecha con corteza de bananero y algodón orgánico, como la de aussieBum) o a la cosmética, así que, ¿por qué no a la juguetería erótica?.

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