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Oscar 2018 Tres víctimas de Harvey Weinstein, juntas en el escenario de los Oscar por el movimiento 'Me Too'

Salma Hayek, Ashley Judd y Annabella Sciorra, tres actrices que fueron víctimas de acoso sexual por parte del denostado productor Harvey Weinstein, subieron al escenario de los Oscar para hacer el discurso más reivindicativo de la noche. 

Ashley Judd, Annabella Sciorra y Salma Hayek, en el escenario de los Oscar 2018. / Reuters

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Salma Hayek, Ashley Judd y Annabella Sciorra, tres actrices que fueron víctimas de acoso sexual por parte del denostado productor Harvey Weinstein, reivindicaron el movimiento 'Me Too' desde el escenario de los Óscar y solicitaron mayor diversidad a Hollywood. 

"Hola, es genial volver a veros a todos, ha pasado mucho tiempo", dijo Sciorra, desplazada de la industria por Weinstein tras rechazar sus propuestas indecentes. "Es un honor estar aquí esta noche. Este año muchos expresan su verdad y el viaje que queda por recorrer es largo, pero lentamente ha surgido un nuevo camino", agregó. 

"Los cambios que estamos viendo están dirigidos por nuevas voces poderosas, voces diferentes. Unirnos es un coro maravilloso para decir finalmente que el tiempo (de los abusos) se ha acabado", declaró. 

Por su parte, Hayek quiso rendir tributo a "los espíritus imparables que rompieron muros y percepciones contra su género, raza y etnicidad para contar su historias". Y Judd recalcó: "Queremos asegurarnos de que los próximos 90 años llegan con posibilidades ilimitadas de igualdad, diversidad e inclusión. Eso es lo que este año nos ha prometido".

Las tres intérpretes presentaron un montaje de imágenes de películas protagonizadas por minorías, mientras una serie de cineastas hablaban sobre los conflictos de género, diversidad y etnicidad que ha enfrentado la industria desde su nacimiento.

"Estamos aquí y no nos vamos a ningún lado", dijo el director Lee Daniels, quien pronosticó que en los próximos años habrá muchas cintas más como "Black Panther", protagonizada principalmente por actores afroamericanos, o "Un pliegue en el tiempo", la primera superproducción de Disney dirigida por una mujer (Ava DuVernay). 

"Yo pensaba que tras el éxito de 'Thelma & Louise' las cosas iban a cambiar", manifestó Geena Davis, protagonista de aquel clásico. "No fue así, pero creo que ahora estamos en el camino adecuado", señaló señaló la actriz en la gala presentada por Jimmy Kimmel.

El discurso de Jimmy Kimmel 

En su monólogo de apertura de la 90 edición de los Oscar, Jimmy Kimmel, que repite como anfitrión tras la gala de 2017, tocó todos los temas -por muy polémicos que fueran-. El presentador estadounidense fue muy aplaudido en especial por sus palabras contra Harvey Weinstein y la situación de las mujeres en Hollywood.

Tras los chistes por el error garrafal de la gala anterior, cuando los encargados de dar el premio -Warren Beatty y Faye Dunaway- se equivocaron de ganador, vinieron las reinvindicaciones. "Podemos trabajar juntos para acabar con el acoso sexual en el trabajo", decía Kimmel.

El presentador ha criticado a Harvey Weinstein y ha asegurado que películas como Call me by your name no se hacen "por dinero", sino para "molestar a Mike Pence", el vicepresidente de EEUU polémico por numerosas declaraciones homófobas. 

Además, Kimmel ha exigido más presencia de mujeres en la industria ya que "solo el 11% de las películas están dirigidas para mujeres", decía. Tras lo que ha reconocido el trabajo de Greta Gerwig, primera mujer nominada a mejor dirección en ocho años.

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