Público
Público

EEUU EEUU aconseja no viajar a 14 países del mundo por su peligrosidad, "fuera de los límites permitidos"

La lista de naciones que el Departamento de Estado elabora cada verano para persuadir a sus conciudadanos de no viajar a estos destinos contiene 14 países. En su mayoría, asiáticos y africanos, pero también dos latinoamericanos: Haití y Venezuela.

La gente presenta sus respetos ante las estatuas del fundador de Corea del Norte, Kim Il Sung L, y el fallecido líder Kim Jong Il en Pyongyang | Reuters

DIEGO HERRANZ

Hay lugares del mundo donde existe un alto potencial de peligrosidad para los estadounidenses. Países con índices de criminalidad fuera de control, cuyos actos delictivos escapan a la acción de la policía y de la justicia. Son 14, a los que el Departamento de Estado americano ha colgado el cartel de “no viajar”, una recomendación sin matices. Es el nivel 4, la lista más negra. Le precede el eslabón 3, de naciones sobre las que los ciudadanos de EEUU deberían “reconsiderar cualquier decisión de desplazamiento”. Otros 15. La mayoría de los primeros son territorios ubicados bien en Asia y Oriente Próximo, o en África. Aunque de ella, emergen dos naciones de América Latina: Venezuela y Haití.

Esta es la clasificación de países más peligrosos para viajar, según la Casa Blanca:

Haití. La diplomacia estadounidense advierte de la elevada criminalidad, los secuestros y de los disturbios y altercados civiles. En febrero de este año, el Departamento de Estado ordenó que todo el personal americano no destinado a labores de emergencia y sus familias retornaran a su país.

Corea del Norte. Alerta de serios riesgos de detención y de encarcelamientos de larga duración a ciudadanos estadounidenses y de que el pasaporte americano no es válido para viajar a uno de los países más aislados del mundo si no va acompañado de un certificado o permiso oficial del Departamento de Estado.

El Gobierno de EEUU es incapaz de proveer servicios de emergencia a sus conciudadanos en Corea del Norte

La recomendación también incluye una explicación sobre la difícil relación bilateral entre ambas naciones: “El Gobierno de EEUU es incapaz de proveer servicios de emergencia a sus conciudadanos en Corea del Norte porque carece de lazos diplomáticos o consulares". Suecia es el país que asume la gestión en caso de que algún ciudadano americano necesite protección. Aunque el régimen de Pyongyang suele retrasar o negar el acceso oficial de funcionarios y diplomáticos suecos a ciudadanos estadounidenses detenidos.

Afganistán. Las advertencias señalan a los altos índices de criminalidad, los riesgos de ataques terroristas y la alta conflictividad social. También por secuestros y hostilidades armadas. Más en concreto, cita lo siguiente: “Niveles críticos de raptos, de hostigamiento, de atentados suicidas, de operaciones militares y acciones de combate entre facciones rivales, campos de minas, y de grupos insurgentes, que emplean ataques con vehículos-bomba accionados o no por controles remotos, y de actos de terroristas con chalecos de explosivos y granadas”.

Varios hombres al lado del lugar del atentado en Maidan Wardak (Afganistán). REUTERS

Varios hombres al lado del lugar del atentado en Maidan Wardak (Afganistán) | Reuters

La Casa Blanca resalta la necesidad de que sus empleados oficiales en Afganistán sigan en todo momento unas estrictas reglas que, además, requieren de seguridad privada.

República Centroafricana. Sobre todo, por los crímenes con violencia, que surgen por los robos con armas, y que suelen desembocar en homicidios. Existen numerosos grupos armados que controlan amplias áreas del territorio y que, a menudo, comenten secuestros de extranjeros. El Gobierno de EEUU tiene una capacidad limitada para asistir a sus ciudadanos en este país, dicen los expertos de la diplomacia americana.

Irán. Otro de los focos de máxima tensión geoestratégica para la Casa Blanca. Pero el diagnóstico del Departamento de Estado incide en los masivos arrestos a ciudadanos estadounidenses en la nación persa, a los que -reconoce- “no puede defender con sus servicios jurídicos diplomáticos”.

En Irán, las peticiones de acceso a estadounidenses en prisión suelen ser denegadas

Las autoridades iraníes “continúan con su tradicional tendencia a las detenciones injustificadas, en particular, de ciudadanos estadounidenses de origen iraní, pero también de estudiantes, de periodistas, de directivos en viajes de empresas o académicos, a los que suele culpar de delitos de espionaje y de otros cargos que amenazan su seguridad nacional”. Las peticiones de acceso a estadounidenses en prisión suelen ser denegadas.

Libia. Criminalidad, secuestros, conflictos armados y altercados sociales. Grupos terroristas y milicias son los principales focos de peligro para viajar. Es una nación en la que se suelen producir detenciones aleatorias, con escasas posibilidades de que puedan acceder a asistencia legal o a un asesoramiento diplomático.

“La violencia se concentra en la capital, Trípoli, pero también en otras ciudades como Surman, Al-Jufra, Misrata, Benghazi o Ajdabiya, donde proliferan actos de violencia armadas entre facciones terroristas y milicias armadas”, explican en el Departamento de Estado, que se concentran, en el caso de objetivos de ciudadanos extranjeros, “en hoteles y en aeropuertos”. A menudo, los actos de protesta acaban en confrontaciones violentas.

Mali. Terrorismo, secuestros y violencia criminal, especialmente en sitios concurridos como los hoteles, clubs nocturnos y lugares de culto. Acceso restringido a tareas de asesoramiento a las autoridades diplomáticas estadounidenses en caso de detención o de supuestos de emergencia.

Somalia. A los habituales riesgos une el de la piratería en áreas frecuentadas por visitantes. Los actos violentos suelen acabar en asesinato. A menudo, usan barricadas y otros bloqueos de rutas para cometer crímenes. Grupos violentos y organizados en redes criminales y mafiosas.

Sudán del Sur. Riesgos similares, pero se añaden los secuestros de coches, tiroteos, los asaltos, robos y emboscadas. Conflictos entre grupos étnicos y políticos que han creado varios conflictos armados y una atmósfera poco recomendable para ciudadanos extranjeros y periodistas.

Siria. “Ninguna parte de este país está a salvo de la violencia”. Pese a la eliminación del califato. “Peligro de bombardeos, de secuestros y de uso de armas químicas”. La Embajada de EEUU está en suspensión de operaciones desde febrero de 2012. Cualquier ciudadano estadounidense o de origen occidental es objetivo de retenciones ilegales.

Cortina de humo tras una explosión en Baghouz, en la provincia siria de Deir Al Zor. - REUTERS

Cortina de humo tras una explosión en Baghouz, en la provincia siria de Deir Al Zor. - REUTERS

Venezuela. Criminalidad desorbitada. Arrestos sin garantías, pobre infraestructura sanitaria y la connivencia con arrestos arbitrarios a ciudadanos estadounidenses. El Departamento de Estado también incluye secuestros. Ordenó a su personal diplomático y a sus familias abandonar el país en enero de este año.

Yemen. Riesgos sanitarios y conflictos armados en todo su territorio. Además de niveles altos de terrorismo y de raptos a civiles. Escasa red sanitaria e infraestructuras devastadas que producen cortes de electricidad, agua y tratamientos médicos inadecuados. Peligro de cólera. La embajada de EEUU en Saná suspendió sus operaciones en febrero de 2015.

Sudán. Terrorismo, arrestos a civiles, secuestros, conflictos armados y violencia criminal entre la que se incluyen secuestros, robos a mano armada, invasión de inmuebles y raptos de coches. En abril de este año, la diplomacia estadounidense ordenó la salida de su personal dedicado a tareas de no emergencia.

Irak. Alta conflictividad armada contra ciudadanos occidentales, particularmente de EEUU, cuya embajada sólo mantiene a su personal dedicado a asuntos no emergentes desde mayo de 2019. Quienes acudan a este país se arriesgan a secuestros, arrestos y asesinatos o, en el mejor de los casos, a su expulsión.

La peligrosidad en Europa (…)

Los países europeos con mayores riesgos de desplazamiento para los estadounidenses se hallan inmersos en el nivel 2, categoría en la que se recomienda aumentar las precauciones y que está un peldaño por debajo del que aconseja reconsiderar decisiones de viaje. En este estatus incluye a doce naciones. Casi todos, por ser o, para ser más precisos, haber sido, en la mayoría de las ocasiones, objetivos de atentados terroristas de corte islamista.

Casi todos, por ser, o haber sido, objetivos de atentados terroristas de corte islamista

Entre ellas está Alemania, Italia, España -donde también se cita los robos de pertenencias en ciudades como Barcelona-, Bélgica, Francia, Reino Unido, Holanda y Dinamarca. Fuera del ámbito de la UE se menciona a Rusia por sus índices de criminalidad y por los riesgos de ataques de movimientos armados nacionalistas, como los grupos chechenos. También la arbitrariedad de ciertas leyes de según qué territorios de sus distintas repúblicas y de ámbito municipal, que generan “potenciales escenarios de alta inseguridad a ciudadanos estadounidenses”.

A Ucrania, donde operan facciones prorrusas que se oponen al no reconocimiento de la adhesión del Kremlin de la Península de Crimea y a la alta contestación social que pervive en el país. A Bosnia-Herzegovina, por los campos de minas que perviven de las guerras de los Balcanes y a Serbia, donde persiste un sentimiento antiamericano y por sus notables niveles de criminalidad y robos.

Mención aparte merece Turquía. En el nivel 3. Con advertencias de terrorismo y de detenciones arbitrarias, con habilidad limitada para resolver legalmente sus situaciones por parte de la sede diplomática y la red consular de EEUU. El riesgo terrorista se eleva, además, por la proximidad fronteriza de Turquía con Siria e Irak.

(…) y en América Latina

La gran mayoría de naciones latinoamericanas, especialmente las del Cono Sur, se catalogan en posiciones recomendables para viajar. Muchas de ellas, como Chile, Uruguay, Guayana francesa, Surinam, Paraguay, Argentina o Bolivia, en el nivel 1, que aconseja un nivel de precaución normal a los ciudadanos estadounidenses.

Brasil, Perú, Ecuador o Colombia están en el siguiente escalón de recomendación, en el mismo que la mayoría de socios europeos. Al igual que México. Aunque hay una serie de países con catalogación 3, que incluye petición de reconsideración para viajar, aparte de Venezuela y Haití, en el 4.

La mayoría de naciones latinoamericanas se catalogan en posiciones recomendables para viajar

Son el rectángulo centroamericano, como lo denominan en el Departamento de Estado. Todos ellos, con muy elevados índices de criminalidad, homicidios y robos, raptos, asuntos turbios relacionados con el narcotráfico y redes de tráfico de personas. Son Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua. También por las dificultades de acceso a los posibles tratamientos sanitarios y asaltos sexuales. Fruto, en muchas ocasiones, de las cada vez más numerosas y más agresivas maras o grupos de delincuencia juvenil que se han hecho con el control de varias ciudades y enclaves en estas naciones.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional