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Italia El amargo adiós (momentáneo) de Salvini

La Liga es el primer partido del país aunque ello no esté reflejado en las Cámaras. Habrá que analizar cuál será la estrategia de un Salvini que, desde que es líder de su partido, no ha visto otra cosa que el aumento de los consesos de su formación.

El ex viceprimer ministro y exministro de Interior italiano Matteo Salvini durante un discurso. EFE/Alessandro Di Meo

El líder ultraderechista de la Liga, Matteo Salvini, parece que ya no ruge como antes. Los italianos, acostumbrados a su propaganda política permanente por toda Italia como vicepresidente del Gobierno italiano, parecen observar una cierta decadencia –momentánea– del capitano soberanista. Su atrevimiento de este verano, que lo vio protagonista al apostar por la caída de su propio Gobierno en coalición con el Movimiento 5 Estrellas (M5E) de Luigi Di Maio para hacerse con todo el poder, le ha salido mal y en su contra. La idea de capitalizar el 36% de los consesos de la nacionalista Liga en las encuestas le ha salido del revés.

¿Cómo es posible que este lunes protagonice una manifestación frente a la Cámara de los Diputados en Roma para protestar en contra del nuevo Gobierno que él mismo ha provocado al marcharse? Los magacines informativos de las principales cadenas del país no esconden su curiosidad a la hora de analizar cómo será el nuevo Salvini, que ya ha dado su amargo adiós al Gobierno italiano. Por ahora.

"Estaré en dicha manifestación de forma pacífica con muchos italianos que están disgustados con lo que está ocurriendo en las últimas semanas"

"Los italianos reconocen la diferencia entre una persona que apunta a los sillones y una que tiene valores", dijo este viernes Salvini en relación a su ex aliado, Luigi Di Maio: "¿Cómo puede un ministro de Trabajo, en una semana, convertirse en el titular de Exteriores?". La coalición de centro-derecha, ahora colocada en bloque en la oposición, se reunirá este lunes por la mañana en Piazza Montecitorio, frente a la Cámara Baja, para expresar su descontento con el nuevo Ejecutivo de Giuseppe Conte, premier que hasta hace dos semanas gobernó con el Movimiento 5 Estrellas, pero que en cuestión de pocos días ha sustituido la nacionalista Liga por el socialista Partido Democrático (PD) para crear uno de los Gobiernos más de izquierda de los últimos años en el país con forma de bota. Un Ejecutivo que, en sus intenciones, apuesta, entre otras cosas, por un mejor salario mínimo profesional, las energías renovables y unos impuestos más progresivos.

"Estaré en dicha manifestación de forma pacífica con muchos italianos que están disgustados con lo que está ocurriendo en las últimas semanas". El evento, lanzado por la soberanista Giorgia Meloni (Hermanos de Italia), tendrá lugar sin los logos de ningún partido. No está previsto que vayan los representantes de Forza Italia, el partido del ex premier Silvio Berlusconi. Aunque la única alternativa para Salvini es una coalición de centro-derecha, sigue habiendo incomprensiones con el Cavaliere quien, en todo momento, apuesta por una alianza marcada por el europeísmo y no por el soberanismo de Salvini.

Salvini ha demostrado ser un ingenuo en materia de estrategias parlamentarias

Está claro que Salvini, cabalgando la ola soberanista, ha demostrado ser una auténtica máquina electoral para generar consesos en Italia: tanto en las redes sociales –es el "rey" de los videoselfies en directo vía Facebook– como en la calle. Desde 2013 hasta 2018 ha llevado a la Liga hasta el 17%. Y en el último año, hasta el 34%. Una vez logrado el 36%, según las encuestas que se manejaban en agosto, el líder leguista, tras los aternos rifirrafes con Luigi Di Maio, apostó por dejarlo todo pensando que se iría directamente a elecciones anticipadas. Así pues, daba por descontado que el M5E y el PD, enemigos históricos, nunca habrían gobernado juntos. Sin embargo, aun gran conocedor la actual propaganda política en la era de las redes sociales, Salvini ha demostrado ser un ingenuo en materia de estrategias parlamentarias. Hay que tener presente que Italia es el país donde en el seno de su política casi todo es posible.

El M5E y PD, por esta razón, se han visto unidos en la necesidad para apartar el soberanismo, resolver las cuestiones económicas urgentes, tranquilizar a los mercados y retomar las relaciones desgastadas con Bruselas. Italia, así pues, se asoma a una nueva etapa más tranquila en el contexto europeo, sin apostar por el desafío soberanista que representaba Matteo Salvini en muchos temas, sobre todo el económico y el migratorio. Sin grandes cambios en un plazo corto, los analistas políticos del país prevén que la nueva coalición de izquierda modificará el concepto migratorio del Estado italiano en el Mediterráneo Central, hasta ahora marcado por la guerra mediática de Savini contra las ONG humanitarias a través de la política de los "puertos cerrados". Desde el punto de vista económico, Italia es posible que goce de mayor comprensión desde Bruselas aunque solicite hacer importantes reformas haciendo uso del décifit.

Agente activo de la propaganda soberanista

¿Qué será de Salvini, entonces, a partir de ahora? Desde luego, aunque los sondeos colocan en estos momentos a la Liga en torno al 33%, al no haber unas elecciones anticipadas y ante un Gobierno M5E-PD que aspira a cierta continuidad, Salvini tendrá que esperar su turno. El problema es que si su permanencia en la oposición se prolongara más de lo debido, su consenso podría perderlo, a lo mejor, tan rápidamente como lo ganó. Sólo el tiempo lo dirá. Lo cierto es que, para él, era más efectivo ser un agente activo de la propaganda soberanista italiana siendo parte del Gobierno y no estando fuera de él, como cualquier miembro de la oposición.

Igualmente, hay que tener bien presente que, por el momento, la Liga es el primer partido del país aunque ello no esté reflejado en las Cámaras. Así que habrá que analizar de cerca cuál será la estrategia de un Salvini que, desde que es líder de la Liga, no ha visto otra cosa que el aumento de los consesos de su formación. Ahora que Salvini ha dejado de tener la inmunidad en cuanto ministro del Interior, se han desbloqueado algunos de los casos judiciales que tenía pendientes. Uno especialmente, el del caso Sea Watch, cuando a finales de junio la capitana del homónimo barco de la ONG alemana, Carola Rackete, entró sin autorización en el puerto de Lampedusa para desembarcar a 43 migrantes por razones de carácter sanitario. Dos meses después de lo ocurrido, la Fiscalía de Milán ha admitido a trámite y está estudiando la querella de la capitana por haber sido "difamada" por Matteo Salvini a través de las redes sociales del entonces ministro del Interior; y por ello, la alemana ha pedido la "incautación" de sus cuentas. Según ella misma detalla, había sido definida como "delincuente", "chula" y "criminal". La nueva ministra del Interior italiana, Luciana Lamorgese, sin embargo, es la única mandataria técnica del nuevo Gobierno de Giuseppe Conte. Y no usa las redes sociales.

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