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Tráfico de drogas EEUU La maña de los narcos

Las ciudades homónimas de Nogales tienen el mayor número de narcotúneles de toda la frontera entre Estados Unidos y México, pero los carteles también han ingeniado otros métodos para pasar la droga a suelo anglosajón

Algunos narcotúneles son auténticas obras de ingeniería, y que se requieren conocimientos sobre la geografía y topografía del lugar para trazar la trayectoria y dar con el diseño adecuado. / Aduanas y Seguridad Fronteriza (US CBP en inglés)

Cuando la economía mexicana colapsó a mediados de los años 90, el flujo migratorio hacia Estados Unidos comenzó a dispararse y las ciudades fronterizas recibieron oleadas de trabajadores mexicanos dispuestos a aceptar cualquier empleo para enviar remesas a sus familias. Una de estas urbes fue Nogales (Arizona) que, desbordada ante un fenómeno migratorio sin precedentes, reforzó la vigilancia en la frontera sur desplegando más agentes de seguridad, instalando cámaras y sensores de movimiento y expandiendo el muro de separación para contener la cascada de inmigrantes. Las medidas, sin embargo, tuvieron un efecto indeseado.

"Con tanta seguridad en el terreno, los carteles en 1995 dijeron: 'si se está poniendo tan difícil el cruce de drogas, vamos a construir túneles de narcóticos'", explica Tony Estrada, que lleva casi 26 años al frente del Departamento del Alguacil del condado de Santa Cruz y en la actualidad es el único alguacil hispano de Arizona.

El primer narcotúnel descubierto en Nogales fue hallado a pocos metros del puesto fronterizo de DeConcini, en una vieja iglesia abandonada que ya no existe. Desde entonces, no han dejado de multiplicarse, y cada vez que las autoridades encuentran y sellan uno, otro nuevo brota en algún lugar.

En Nogales se han descubierto más de un centenar de túneles clandestinos

Asegura Estrada que, desde los años noventa, solo en esta urbe se han descubierto más de un centenar de túneles clandestinos, la mayoría vinculados al cartel de Sinaloa, cuyo líder, el excapo de la droga Joaquín El Chapo Guzmán, cumple condena en Estados Unidos.

En el sector de Tucson –que abarca dos tercios de la frontera de Arizona incluyendo Nogales– se han encontrado 123 de los más de 200 hallados a lo largo de toda la línea divisoria entre México y Estados Unidos, según datos de la Patrulla Fronteriza.

El túnel más reciente fue encontrado el pasado 25 de octubre y estaba aún en construcción cuando fue descubierto por la policía federal mexicana, la cual alertó a las autoridades estadounidenses, con quienes cooperan estrechamente en las labores de búsqueda y sellado de narcopasadizos. 

"Auténticas obras de ingeniería"

Cuenta Estrada que algunos corredores subterráneos son auténticas obras de ingeniería, y que se requieren conocimientos sobre la geografía y topografía del lugar para trazar la trayectoria y dar con el diseño adecuado. Algunos pasadizos tienen iluminación, sistemas de ventilación, raíles y están reforzados con madera en el techo y a los lados para garantizar que el traficante puede caminar agachado sin que se produzca un derrumbe.

Otros utilizan casas, comercios o restaurantes como puntos de entrada y de salida. El más largo encontrado en Nogales hasta la fecha tenía una longitud de 60 metros y, para asombro de los agentes fronterizos y del propio alguacil, atravesaba un cañón.

Pero una de las peculiaridades que mejor han sabido explotar los narcotraficantes es el sistema de drenaje pluvial y alcantarillado subterráneo que conecta las entrañas de Ambas Nogales, y que fue construido en los años 30 para evitar inundaciones. 

También hay, sin embargo, corredores diseñados sin tanta sofisticación que cumplen sin problemas su principal misión: pasar la droga a Estados Unidos aunque sea tirando con una cuerda de un lado a otro.  

Cuando se reforzó la vigilancia en la frontera entre México y EE.UU., los carteles comenzaron a construir pasadizos ilegales subterráneos para pasar la droga al país anglosajón. /Aduanas y Seguridad Fronteriza (US CBP en inglés)

Cuando se reforzó la vigilancia en la frontera entre México y EE.UU., los carteles comenzaron a construir pasadizos ilegales subterráneos para pasar la droga al país anglosajón. /Aduanas y Seguridad Fronteriza (US CBP en inglés)

"La obra de mano es barata en México y hay gente dispuesta a hacer ese trabajo", asegura el alguacil. "Aparte de eso, los carteles tienen billones o millones de dólares. Para ellos, el dinero –el costo– no es nada". 

"Hemos visto paquetes de droga tirados por el desierto"

Además de los narcopasadizos, algunos carteles han ido perfeccionando e introduciendo en su repertorio nuevos métodos de contrabando y transporte de droga como los drones. Sin embargo, los métodos tradicionales siguen siendo igualmente populares y efectivos: unos optan por el uso de avionetas ligeras a las que llaman chicas, otros prefieren lanzar la droga por encima de la valla fronteriza y hay carteles que obligan a los inmigrantes indocumentados a pasar la droga –en particular la marihuana– por el desierto.

"Nosotros hemos visto paquetes de droga tirados por el desierto de Sonora, y cuando los vemos, abandonamos el área para no tener problemas con los carteles", explica Ely Ortiz, fundador de la ONG Águilas del Desierto, que se dedica a peinar el desierto de Sonora buscando restos humanos de inmigrantes. 

Pero uno de los problemas que más preocupa a las autoridades es que cada vez más jóvenes están transportando la droga directamente por los puestos fronterizos para vehículos y peatones a cambio de cantidades que rondan los 500 dólares. Algunos acaban arrestados y trasladados a la oficina de Estrada.

"El muro no es la solución"

"El muro que quiere poner el gobierno ahorita o que está poniendo…no es la solución porque la mayoría de las drogas fuertes están pasando por las garitas", asevera el alguacil. Y si en el pasado se introducían gramos de una sola droga –como la anfetamina–, ahora se transportan kilos de esta potente droga y "cócteles de drogas" que incluyen fentanilo, heroína y cocaína. Todo para satisfacer la demanda de Estados Unidos, a quien el alguacil señala como el mayor consumidor de drogas del mundo. 

Túnel en Nogales, Arizona. / Aduanas y Seguridad Fronteriza (US CBP en inglés)

Túnel en Nogales, Arizona. / Aduanas y Seguridad Fronteriza (US CBP en inglés)

"Con el vicio que tenemos de drogas aquí, estamos causando y creando a los carteles", opina el mexicano. Pero la maña y crueldad de los capos no concluye aquí. No solo convierten en "narcotraficantes forzados" a los inmigrantes desesperados por alcanzar Estados Unidos, sino que también se ceban con los animales.

Las autoridades han llegado a encontrar narcoburros, –como Doña Cuca, que fue rescatada y entregada a un granjero de Arizona–, y narcocaballos desnutridos y abandonados a su propia suerte en zonas no urbanas. Porque una vez que estos animales han cumplido con el cometido de entregar la droga, son inservibles para los narcotraficantes. "Es increíble los métodos y las formas que utilizan para engañar a las autoridades tanto allá como acá", concluye Estrada.

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