Un importante número de personas fueron agredidas el pasado lunes por miembros de grupos de la extrema derecha valenciana armados cuando participaban en la tradicional manifestación reivindicativa del 9 d'octubre que se celebra cada año en Valencia.

Ante la violencia de los grupos neonazis y la actuación policial, Compromís y Podem han reclamado la dimisión del delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, como responsable de las  agresiones. 

Según Podem, Moragues debe dimitir "por haber permitido que una contramanifestación ilegal de grupos de ultraderecha" se cruzara con la convocada legalmente por la Comissió, que aglutina a partidos y entidades de izquierda y nacionalistas.

En un comunicado, Podem señala que ya en la procesión cívica de esta mañana representantes de esta formación no han podido finalizar el recorrido porque "un grupo de ultras les ha impedido el paso, les ha insultado y escupido, y han tenido que ser escoltados por la policía a una calle aledaña y les han protegido hasta que se ha normalizado la situación".

Los políticos valencianos también han hecho públicos por la red social Twitter las peticiones de dimisión de Moragues, como es el ejemplo de Joan Baldoví.

Junto con esta petición ha incluido la propuesta de Declaración Institucional que han presentado en el Congreso de los Diputados para que sea aprobada en el pleno condenando las "agresiones e insultos fascistas" durante la Procesión Cívica matinal de la Senyera y la manifestación vespertina.

El portavoz de Compromís en Les Corts, Fran Ferri, también ha escrito en su perfil de la red social Twitter: "En una sociedad plural, avanzada y democrática como la valenciana no podemos tolerar agresiones violentas como las de hoy. ¡Moragues dimisión!".

La vicepresidenta del Consell y coportavoz de Compromís, Mónica Oltra, ha escrito: "A los de la violencia y agresión en València. A los partidos que la alentáis. No sois bienvenidos, no nos representáis. València es de paz".

En esa misma red social, el alcalde de València, Joan Ribó (también de Compromís), ha señalado que en esta ciudad "cualquier persona tiene derecho a expresarse libremente, sin asedio. La Delegación del Gobierno ha de garantizarlo".

A estas peticiones de políticos valencianos, sigue otra larga lista de personajes públicos que han condenado la violencia de los grupos de extrema derecha durante la manifestación y la actuación de Delegación de Gobierno.