Rodrigo Rato y el resto de procesados en el juicio por la ruinosa salida a Bolsa de Bankia han intentado desactivar a las acusaciones personadas en la causa, pero la Audiencia Nacional ha rechazado sus pretensiones, y mantendrá a todas las acusaciones particulares y populares.  La sección cuarta de la Sala de lo Penal se ha pronunciado en contra de la mayoría de cuestiones previas planteadas a finales de noviembre por las defensas de los 34 acusados, entre ellos el exvicepresidente del Gobierno de José María Aznar y expresidente de la entidad.

Así, fuentes de la Audiencia han informado de que el auto hecho público este martes por el tribunal que preside la magistrada Ángela Murillo permite que sigan ejerciendo como acusación la Confederación Intersindical de Crédito (CIC), 15 M-pa Rato y la Confederación General del Trabajo (CGT), entre otros.

El juicio se ha reanudado hoy con la declaración del que para el PP sigue siendo el "artífice" del "milagro económico", y hay sesiones programadas en la sede de la Audiencia en San Fernando de Henares (Madrid) hasta junio. Estaba previsto concentrar los trabajos en la mañana, si bien Murillo ha avanzado que desde la próxima semana también habrá sesiones de tarde, dada la envergadura de la causa. 

Además, el tribunal ha dejado claro en el auto que la asistencia es obligatoria salvo casos excepcionales, en respuesta a la petición de varios acusados de que se les eximiera de estar presentes en la mayoría de jornadas.

En noviembre, las defensas cargaron contra las acusaciones y negaron la legitimidad de pequeños ahorradores y grupos como Adicae (Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros) para seguir personados en la causa. La mayoría intentaron acogerse a la doctrina Botín, aprovechando que la Fiscalía sólo acusa a cuatro de los exdirigentes de la entidad.

La Botín establece el archivo de la causa contra una persona si no es acusada por el Ministerio Público o un particular, si bien esta doctrina "ha experimentado una clara evolución" en la jurisprudencia del Tribunal Supremo, tal y como recoge el auto.

Por otra parte, la Audiencia también se ha opuesto a la petición de Fiscalía de incorporar a la causa documentos  relacionados con la quiebra del Banco de Valencia. En cambio, sí ha retirado el delito de falsedad contable atribuido a las personas jurídicas Bankia, su matriz BFA y la auditora Deloitte, sobre las que ahora sólo pesa un presunto delito de estafa a inversores.

"Las personas jurídicas no se enmarcan dentro del círculo de posibles responsables penales de tal delito y consecuentemente está fuera de lugar tal acusación por elemental respeto a la legalidad penal", establece el tribunal.