Las primarias de Ciudadanos se pueden dividir en dos grupos; en el primero se encuentra el candidato "oficial", respaldado por la dirección -y que suele ser una cara más o menos conocida- y en el segundo, el resto. El caso de Francisco Igea, diputado en el Congreso y miembro de la ejecutiva nacional de Cs, es una de las honrsosas excepciones. Igea se enfrentará a Silvia Clemente, presidenta de las Cortes castellano y leonesas por el Partido Popular hasta la pasada semana, en las primarias para presidir la Junta de Castilla y León. 

A Albert Rivera, líder del partido naranja, le disputan las primarias 17 personas, 16 hombres y una sola mujer, Felisa Pascual García. El único requisito que deben cumplir los militantes para presentarse a primarias es tener más de nueve meses de antigüedad en la afiliación y estar al corriente de pago de las cuotas; este proceso -sin avales- dificulta que candidatos 'no oficiales' sean elegidos, ya que el plazo para votar es de una semana y no se organizan debates.  

Entre los rivales de Rivera, destaca el nombre de Enrique Boto, un militante crítico con la gestión del líder de Ciudadanos al frente del partido, y en cuya carta de presentación se muestra contrario a que una misma persona ostente el cargo de presidente del partido y el de candidato a la Presidencia del Gobierno. Boto considera que "la concentración de poder puede favorecer el ascenso de personas ambiciosas y quizá brillantes, pero, seguramente, sin excesivos escrúpulos". Un dardo envenenado para Rivera. 

Otro de los candidatos, Fernando Mellina Olivares, fue suspendido de militancia por el Partido Popular de Andalucía. Sucedió en noviembre de 2017 y desde entonces Mellina no puede militar en las filas 'populares' durante cuatro años y está inhabilitado para desempeñar cargos. Así lo decidieron al considerar que la actitud de Mellina fue contraria a lo que estipulan los estatutos.

Según la resolución, Mellina, a través de redes sociales, aseguró que no reconocía al presidente provincial del PP en Jaén y señaló que la dirección había actuado "como los caciques, como lo hacía Franco hace 40 años" y arremetió contra "los dedazos" de la actual directiva provincial del partido, a quien restó legitimidad.

También se enfrentan a Rivera cargos locales a los que éste aupó en el pasado. Es el caso de Jose Antonio Mulero Martin, candidato de C’s al Ayuntamiento de Cornellà (Barcelona) en 2011. Mulero explica que se afilió a Ciudadanos en diciembre del 2005 y participó en la formación de la agrupación de Cornellá, ejerciendo también como adjunto a la Secretaría de Organización. 

Albert Rivera junto a Toni Mulero en 2011. Fuente: Ciudadanos.

El excoordinador de Ciudadanos en La Rambla (Córdoba), José Jaime Calleja Ruz, antiguo trabajador del Consorcio de la Unidad Territorial de Empleo de la Junta de Andalucía, también se ha presentado frente a Rivera. 

Este elevado número de candidaturas contrasta con el de 2015; en aquel año los militantes de Cs no llegaron a votar para elegir al cabeza de lista al Congreso porque los cinco afiliados que pretendían competir con Rivera no reunieron los avales necesarios para poder presentarse. En las primarias de 2017 se enfrentó a Diego de los Santos y Juan Carlos Bermejo -que ahora trata de disputarle el puesto a Ignacio Aguado en la Comunidad de Madrid-, a los que venció con una amplia mayoría. 

Los 18 aspirantes tienen únicamente ocho días para hacer campaña y convencer al resto de militantes de votar por su candidatura entre el viernes 8 de marzo y el sábado 9, fecha en la que se conocerá al ganador -o ganadora- de las primarias.