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10-N El voto rogado vuelve a fallar: la diáspora denuncia problemas a las puertas del 10-N

Papeletas que no han llegado a tiempo, dificultades para inscribirse en el censo… los españoles residentes en el extranjero advierten que votar es una auténtica “odisea”. Uno de los afectados ha formulado una queja ante el Defensor del Pueblo. 

Imagen de archivo de una movilización para denunciar las dificultades del voto rogado. MAREA GRANATE

El Defensor del Pueblo lo veía venir. Hace algunas semanas, Francisco Fernández Marugán emitió un comunicado en el que recordaba a la administración que debía poner “todos sus medios” para garantizar el voto de la ciudadanía española en el extranjero. Sus recomendaciones han chocado con la realidad: según denuncian desde la diáspora, los problemas han vuelto a formar parte de quienes desean votar pero no terminan de conseguirlo.

El procedimiento parecía más sencillo que en otras ocasiones. En esta oportunidad, al tratarse de una repetición electoral, los 182.500 españoles inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) que pidieron votar en las elecciones del pasado 28 de abril y vieron aceptada su solicitud no tendrían que volver a pedirlo de cara al 10 de noviembre.

“En abril había rogado su voto el 8% del censo en el exterior. Para estas elecciones el ruego ha subido hasta el 10%”, afirma a Público María Almena, portavoz de Marea Granate, el colectivo de migrantes que lleva a cabo una campaña de denuncia sobre lo que denominan “voto robado” en lugar de rogado.

Durante los últimos días, españoles residentes en distintas partes del planeta se han puesto en contacto con Marea Granate para contar la “odisea” de votar en las elecciones del 10-N. El catalán Héctor Pujols, afincado en Santiago de Chile, es uno de ellos.

Este docente de Ciencias Políticas ostenta uno de los récords en la materia: “en cuatro años han habido tres generales, unas catalanas y unas europeas”, contabiliza. Todas ellas le encontraron en Chile. En ninguna consiguió votar. “No me llegan las papeletas aunque si el papel para rogar así que asumo que no es un problema de que mi dirección esté mal”, explica. Seguido cuenta que una vez le llegaron las papeletas… “dos meses después de las elecciones”.

Ante esa situación, Pujols ha enviado una queja ante el Defensor del Pueblo. “Dada la proximidad de la cita electoral y los antecedentes de otros procesos, me permito afirmar que el próximo día 10 de noviembre no podré ejercer mi derecho a voto”, afirmaba en el escrito presentado el jueves.

Con ese documento en la mano, asegura que en Chile son “unos cuantos” los españoles que han atravesado problemas similares. “Hay mucha gente que ya ni lo intenta”, subrayó.

Buscando un fax

En tal sentido, Almena destaca que existen problemas distintos en torno a este mismo asunto. La inscripción en los consulados, señala, es uno de ellos. “En la mayoría de los casos tiene que ser presencial. Hay gente que vive lejos de las oficinas y tiene que pedirse días en el trabajo e incluso pagarse un lugar para dormir”, relata.

“Luego, con la gente que consigue rogar, tenemos problemas con los envíos, porque los plazos siguen siendo tan cortos que en muchos sitios es imposible que las papeletas lleguen a tiempo”, subrayó.

Silvia Martínez Urbina, una española afincada en la localidad holandesa de Tilburg, ha sido testigo de todo esto. “Solicité el voto por email a la delegación de Ciudad Real, pero me dijeron que sólo lo admitían si era por fax, que es lo mismo pero del siglo pasado. En cinco sitios diferentes intenté encontrar un fax y todos me decían que en Países Bajos casi nadie lo utiliza, así que pagué una carta certificada”, contó a Público.

Sus papeletas llegaron el día 5, justo cuando acababa el plazo para votar desde el exterior. Así se lo hizo saber vía Twitter a la embajada de España en Holanda, que le respondió también por esa vía que “el Consulado en Amsterdam ampliará su horario y abrirá este fin de semana, sábado y domingo, para facilitar el derecho al voto”. El jueves, la Junta Electoral Central acordó que se ampliaría dos días el plazo del voto rogado, de forma que los centros de votación en el exterior permanecerán abiertos este sábado y domingo”.

La Junta exhortó además a los consulados y oficinas en el exterior a “utilizar todos los medios que dispongan” para enviar los sobres de votación “por el procedimiento más rápido posible al ministerio de Asuntos Exteriores”. Según Marea Granate, en las elecciones del pasado 28 de abril se perdieron 11 mil votos que no llegaron a tiempo para el recuento.

Voto por correo, sin incidentes

La situación del voto por correo dentro de España ha sido menos conflictiva. Según datos de Correos, hasta el jueves habían enviado su voto 900.188 personas, un 26% menos que en abril pasado.

Fuentes sindicales señalaron a Público que las dificultades registradas de cara a las elecciones del domingo han sido las “normales” cuando existen procesos de este tipo. En abril pasado, la coincidencia con la Semana Santa provocó un incremento de las solicitudes de voto por correo que, a su vez, derivó en largas colas y oficinas saturadas.

En esta ocasión, la polémica ha girado en torno a los policías enviados a Catalunya que no habían podido ejercer su derecho al voto. Este viernes, el Tribunal Supremo ordenó a la Junta Electoral Central que se adopten todas las medidas necesarias para que los agentes que no pudieron solicitar su voto por correo puedan votar sin inconvenientes en los colegios catalanes.

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