Las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular han criticado el acuerdo que ha alcanzado el Gobierno con ERC y PNV para que los trabajadores interinos que llevan más de cinco años en el mismo puesto consigan una plaza fija. Se trata de un pacto, según el cual, estos trabajadores no necesitarán opositar ni escalar mediante concursos de méritos. En cambio, los lideres del PSOE han valorado positivamente la medida, aunque algunos prefieren esperar a ver "la letra pequeña".

Todas las comunidades con el PP en el poder han arremetido contra el acuerdo. Una de las primeras en hacerlo ha sido la Comunidad de Madrid, que ha tachado este acuerdo de "extraordinariamente preocupante" y lo han tildado de "concesión demagógica". En la misma línea han ido las críticas de Andalucía, Castilla y León y Murcia.

En el caso de Andalucía le han pedido al ejecutivo que tenga "cuidado" a la hora de regular este pacto para garantizar la legalidad de la medida y evitar que derive en "sentencias e indemnizaciones" que tengan que pagar los ciudadanos, algo en lo que ha coincidido la Xunta de Galicia, que ha advertido de que se abren "mayores espacios de inseguridad jurídica".

La letra pequeña

Por otro lado, las comunidades dirigidas por el PSOE han visto con buenos ojos el acuerdo, que reduciría la temporalidad. Extremadura y Baleares han preferido esperar a conocer las condiciones concretas en las que se plantea. En ambos casos consideran una buena noticia el acuerdo para disminuir la temporalidad pero prefieren no adelantar acontecimientos.

Por su parte, el Gobierno asturiano ha resaltado la importancia de contar con un "marco jurídico estable" a la hora de regular la posibilidad de convertir en fijos a trabajadores públicos interinos, mientras que el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, y su homóloga en La Rioja, Concha Andreu, han avalado el acuerdo.