El Defensor del Pueblo sigue sin considerar suficientes las explicaciones del Ministerio del Interior a la masacre de Melilla. En un escrito, la institución que dirige Ángel Gabilondo ha recordado al titular de la cartera, Fernando Grande-Marlaska, cuáles son sus deberes y qué recomendaciones debe seguir para rendir cuentas por la tragedia. Según varias ONG, el pasado mes de junio al menos 23 personas migrantes fallecían en la valla de Melilla a manos de las fuerzas policiales, imágenes que adelantó en exclusiva Público. 

Marlaska se pronunció después de que la Fiscalía reclamase todos los archivos existentes del crimen fronterizo, al detectar en las grabaciones saltos temporales. El ministro reiteró, en numerosas ocasiones, que "no hubo ninguna muerte en suelo español". En esta misma línea fueron todas sus declaraciones. Lo cierto es que una investigación periodística demuestra que, al menos, una persona perdió la vida en la zona del confín controlada por España. 

El Defensor del Pueblo, que anteriormente había solicitado más detalles de la masacre, ha remitido un comunicado como respuesta a las ONG que denunciaron la situación. En el texto, hace referencia a las vulneraciones de derechos humanos que se registraron en la valla de Melilla y recuerda al Ministerio del Interior la necesidad de priorizar este enfoque por encima de cualquier consideración geográfica o policial que pueda existir. 

Gabilondo explica que el pasado 28 de noviembre pidió más información al departamento que encabeza Marlaska, por estimar exiguas sus justificaciones y no aceptar las recomendaciones propuestas. Asimismo, ha insistido en la presencia de varios "requerimientos a los que aún no se ha contestado". Mientras aguarda por nuevas respuestas, el Defensor del Pueblo reitera las advertencias legales expresadas previamente y hace hincapié en el derecho a la integridad física y moral que toda persona debería tener garantizado.

La breve respuesta de Interior

Desde el Ministerio del Interior muestran su "disposición a estudiar en profundidad las aportaciones del Defensor del Pueblo". No hacen ninguna mención a la insistencia de Gabilondo en que las expulsiones de Melilla fueron ilegales. Además, el equipo de Marlaska aprovecha para volver a la carga con la "no existencia de personas fallecidas en territorio nacional", pese a que varias investigaciones han demostrado lo contrario.