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Opinión · Principia Marsupia

7 poemas de Juan Gelman

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juan

Anoche murió Juan Gelman.

Empecé a escribir poemas a los nueve años. Claro que fue por una chica. Al principio le mandaba versos de un argentino del siglo XIX, Almafuerte, pero no me hizo caso. Así que decidí probar yo mismo. Tampoco me hizo caso. Ella siguió por su camino y yo me quedé con la poesía.
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Así explicaba Gelman sus comienzos literarios al conocer que había recibido el Premio Cervantes en 2007.

Luchador feroz contra la dictadura argentina, Gelman pagó muy caro su activismo político. El 24 de agosto de 1976, un grupo de militares irrumpió en su casa. Él no estaba allí. Se llevaron a su hijo y a su nuera, embarazada. Nunca los volvería a ver. Reencontró a su nieta robada 23 años después.

Aquí os dejo algunos de los poemas que más me emocionan de Gelman. Me encantaría que compartiéseis los vuestros en la sección de comentarios.

CANCIÓN

"tu pelo habrá crecido"

canto en mi soledad

y lo acaricio

Cólera buey (1964)

***

CONFIANZAS

se sienta a la mesa y escribe

«con este poema no tomarás el poder» dice

«con estos versos no harás la Revolución» dice

«ni con miles de versos harás la Revolución» dice

y más: esos versos no han de servirle para

que peones maestros hacheros vivan mejor

coman mejor o él mismo coma viva mejor

ni para enamorar a una le servirán

no ganará plata con ellos

no entrará al cine gratis con ellos

no le darán ropa por ellos

no conseguirá tabaco o vino por ellos

ni papagayos ni bufandas ni barcos

ni toros ni paraguas conseguirá por ellos

si por ellos fuera la lluvia lo mojará

no alcanzará perdón o gracia por ellos

«con este poema no tomarás el poder» dice

Relaciones (1973)

EL INFIERNO VERDADERO

Entre las 5 y las 7,

cada día,

ves a un compañero caer.

No pueden cambiar lo que pasó.

El compañero cae,

y ni la mueca de dolor se le puede apagar,

ni el nombre,

o rostros,

o sueños,

con los que el compañero cortaba la tristeza

con su tijera de oro,

separaba,

a la orilla de un hombre,

o una mujer.

Le juntaba todo el sufrimiento

para sentarlo en su corazón

debajito de un árbol

El mundo llora pidiendo comida

Tanto dolor tiene en la boca

Es dolor que necesita porvenir

El compañero cambiaba al mundo

y le ponía pañales de horizonte.

Ahora, lo ves morir,

cada día.

Pensás que así vive.

Que anda arrastrando

un pedazo de cielo

con las sombras del alba,

donde, entre las 5 y las 7,

vuelve a caer, tapado de infinito

Interrupciones II (1988)

EL JUEGO EN QUE ANDAMOS

Si me dieran a elegir, yo elegiría

esta salud de saber que estamos muy enfermos,

esta dicha de andar tan infelices.

esta inocencia de no ser un inocente,

esta pureza en que ando por impuro.

Si me dieran a elegir, yo elegiría

este amor con que odio,

esta esperanza que come panes desesperados.

Aquí pasa, señores,

que me juego la muerte.

El juego en que andamos (1959)

MONJA EN EL OMNIBUS

Entre hombres y paquetes, diarios envejecidos,

caras secas, sudores, mejillas con rencor,

envuelta en el silencio de su capucha pálida

la novia de dios viaja con Cristo

sobre los pechos que a nadie dieron de comer.

Velorio del solo (1961)

XCI

toda poesía es hostil al capitalismo

puede volverse seca y dura pero no

porque sea pobre sino

para no contribuir a la riqueza oficial

puede ser su manera de protestar de

volverse flaca ya que hay hambre

amarilla de sed y penosa

de puro dolor que hay puede ser que

en cambio abra los callejones del delirio y las bestias

canten atropellándose vivas de

furia de calor sin destino puede

ser que se niegue a sí misma como otra

manera de vencer a la muerte

así como se llora en los velorios

poetas de hoy

poetas de este tiempo

nos separaron de la grey no sé que será de nosotros

conservadores comunistas apolíticos cuando

suceda lo que sucederá pero

Cólera buey (1964)

FINAL

Ha muerto un hombre y están juntando su sangre en cucharitas,

querido Juan, has muerto finalmente.

De nada te valieron tus pedazos

mojados en ternura.

Cómo ha sido posible

que te fueras por un agujerito

y nadie haya ponido el dedo

para que te quedaras.

Se habrá comido toda la rabia del mundo

por antes de morir

y después se quedaba triste triste

apoyado en sus huesos.

Ya te abajaron, hermanito,

la tierra está temblando de ti.

Vigilemos a ver dónde brotan sus manos

empujadas por su rabia inmortal.

Gotán (1962)

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