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Opinión · Carta con respuesta

No sólo verdura

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Los jóvenes aspirantes a literatos somos portadores del futuro del arte, de un bello ideal por el que sacrificamos nuestras vidas, y que sin embargo, no sirve para nada. Estamos en plena decadencia literaria. Solo prima la sencillez, la lista de best-sellers, y el borreguismo utilitario. Nadie se interesa por nosotros, nadie lee ya poesía nueva, innovadora, creativa. ¡Cuántos versos luminosos se habrán perdido en los mares del desprecio y de la ignorancia! ¿Cuántos Alejandros Sawa y Emilios Carrere tienen que perderse en el olvido? Yo mismo he editado más de cinco poemarios, y jamás han tenido la más mínima oportunidad de caer en manos de ningún editor. Rejuvenezcamos este noble arte. Construyamos una Edad de Bronce de la literatura hispana. 

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LUIS ASENJO ROBLES. MADRID 

Pues ánimo, amigo. Pero no se crea que en en1927 todo el mundo leía a Alberti o Cernuda. Ni mucho menos. Leían (los que leían) folletines y literatura galante (o sea, porno light). En su infinita bondad y sabiduría, el buen Dios nos ha dado caninos, incisivos y molares: señal de que no pretende que comamos sólo verduras. Unas acelgas rehogadas en Juan Benet serán buenas para el crecimiento (del espíritu), pero, qué canastos, a mí también me gustan los torreznos, las novelas de espías y las hamburguesas: no sólo de sana “poesía nueva, innovadora, creativa” vive un paisano.  

Una cosa es el prestigio cultural, que lo deciden los mandarines, y otra lo que lee la gente. Los mandarines, en sus pesebres editoriales o docentes, no son inmunes a los intereses económicos que les dan de comer. En este capitalismo feroz, leemos lo que nos obligan a leer, igual que nos ponemos chaquetas con o sin solapas según corresponda. Bailamos al son que tocan, pero no sólo en la lectura, amigo. 

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Podemos hacer una de dos cosas. Number one: impugnar la totalidad del sistema literario, incluidos nosotros mismos, sus cinco poemarios y mis infumables novelas. Number two: admitir que está muy bien que se promocione a determinados autores, pero protestar porque no somos nosotros los beneficiados. Yo no soy muy partidario del quítate tú para que me ponga yo.

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