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Rusia cierra temporalmente el gaseoducto que une Moscú con Berlín

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Con el Nord Stream 1, el gasoducto de 1.200 kilómetros que une Moscú con Berlín, sin bombear ni un centímetro cúbico de gas por unas obras de mantenimiento, Alemania se teme lo peor: que Putin aproveche para cerrar el grifo de forma definitiva, y llama a la población a reducir su consumo de energía este verano para tener las reservas de gas llenas en invierno. Una llamada a la prudencia energética que ya se repite aquí. El Gobierno insiste en que el suministro está garantizado, mientras ya prepara el plan de contingencia pedido por Bruselas. Porque la primera consecuencia de un corte del gas ruso se reflejaría en el precio. Crece la incertidumbre de cara a un invierno con problemas de gas y petróleo. -Redacción-

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