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Israel busca al culpable de un vertido de alquitrán que ha causado una catástrofe ecológica en su costa mediterránea

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El cadáver de una ballena de aleta de 17 metros de largo en una playa en el sur de Israel, y que tienen que retirar con grúa, es solo una muestra del enorme impacto que ha tenido allí la última catástrofe medioambiental, y que tardará meses o incluso años en limpiarse. Decenas de voluntarios se reunían este domingo para eliminar la basura negra y pegajosa de la fina y blanca arena mediterránea. El ejército desplegará a miles de soldados que ayudarán a hacer desaparecer el alquitrán. Las organizaciones ecologistas lo tildan ya de desastre y hablan de pérdidas irreparables para la vida silvestre de la zona. Un suceso que comenzó la semana pasada, durante una tormenta invernal. Las agencias europeas y las autoridades israelíes tratan de dirimir con imágenes satélite qué barco pasó a unos 50km. de su costa, lo que podría arrojar pistas sobre la autoría del vertido. De encontrar al culpable Israel podría emprender acciones legales para exigirle una compensación que ayude a lidiar con las consecuencias ecológicas, que ya han cifrado en decenas de millones de euros. -Redacción-

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