Un agente de la Guardia Urbana de Barcelona mató el martes a un perro que, según la propia policía, le había mordido. La muerte del animal sucedió minutos después. El partido Pacma convocó una protesta esa misma tarde en la capital condal después de comprobar los hechos por un vídeo en las redes sociales de lo sucedido.

La raza del animal está considerada como "potencialmente peligrosa", por lo que los agentes procedieron a identificar a su propietario, ya que la mascota estaba sin atar y sin bozal. En ese instante, tal y como relatan desde la Guardia Urbana, el animal se habría abalanzado sobre el agente mordiéndole en el brazo. Acto seguido, el policía abrió fuego para evitar que el perro continuara mordiéndole.

La respuesta del dueño fue agredir al agente que estaba disparando, un hecho por el que acabó detenido. En los propios términos de la Guardia Urbana, el agente abrió fuego "en defensa de su integridad física". Lamentan, asimismo, la muerte del animal y afirman que el policía en cuestión se encuentra de baja por una contusión en la frente y "ruptura dental".

Testigos desmienten la versión policial

Las personas que presenciaron el suceso tienen una opinión diferente a la aportada por la Guardia Urbana. Según diversos testigos presenciales, todo empezó entre el dueño del animal y los agentes, que llegaban a la media docena. Afirman que se efectuaron algunos golpes entre las dos partes y, después, uno de los agentes disparó a la cabeza del animal, que se encontraba ladrando sin parar.

Algunos colectivos ya han pedido al Ayuntamiento de la capital catalana que se abra una investigación de los hechos, como es el partido PACMA o a Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (FAADA). Desde el partido político declaran que "no puede ser que la solución a problemas con animales sea pegarle dos tiros. Esto no es el Salvaje Oeste, hay medios y métodos alternativos, y esto es lo que exigimos, su adopción y aplicación".

Desde PACMA reiteran que "son necesarias explicaciones urgentes que determinen los motivos de este procedimiento extremo que ha acabado con la vida de una perra que, según muchos testigos, nunca había actuado previamente de forma agresiva".

La CUP se posiciona en el mismo lado y pide que se den las "consecuencias" necesarias para el agente que mató al animal sin que el caso sea archivado, "como acostumbra a pasar con las malas praxis policiales", completan desde la formación independentista.

Por su parte, desde el municipio confirman que ya se ha iniciado el protocolo pertinente por el uso de arma reglamentaria.

Respecto a la concentración, esta ha reunido a cientos de personas, según comunican desde Pacma, en la plaza de San Jaume de Barcelona.

Cientos de personas piden responsabilidad al Ayuntamiento de Barcelona por la muerte de un perro a disparos de un policía de la guardia urbana | Pacma