Dos dotaciones terrestres de Bomberos, dos vehículos de vigilancia y el personal de las torres de vigilancia de la zona siguen trabajando sobre el terreno del incendio de Cadalso de los Vidrios y Cenicientos, que cumple hoy domingo nueve días desde que se inició en el población toledana de Almorox, y que aunque está controlado, no se da por extinguido, ha informado a Europa Press un portavoz de Emergencias Comunidad de Madrid 112.

En concreto, los efectivos siguen en la zona realizando tareas de vigilancia, recorriendo el terreno para buscar posibles puntos calientes y refrescar la tierra y la vegetación. Así, están rematando partes calientes y pequeños incendios en árboles.

El 112 ha recibido varias llamadas de columnas de humo por parte de vecinos, pero generalmente se tratan de remolinos de cenizas provocados por el viento. No hay ningún medio aéreo activado pero están a disposición por si fueran necesarios en cualquier momento.

El pasado jueves por la tarde se retiró el puesto de control que se había instalado junto a la plaza de toros de Cenicientos porque el número de dotaciones ha ido disminuyendo y no hace falta el control 'in situ' para coordinar, sino que se puede hacer directamente desde el centro de coordinación de Bomberos en el centro de Madrid 112. Durante cinco días llegaron a estar trabajando 500 personas.

Según los últimos datos facilitados por la Comunidad de Madrid, unas 2.500 hectáreas se han visto afectadas en la región por el incendio aunque se estima que cuando se recalcule la cifra, ésta disminuirá porque han quedado zonas verdes dentro de la parte afectada que se restarán del total de hectáreas.

El Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) baraja el factor humano como origen de este incendio forestal iniciado el viernes en Almorox (Toledo) y que se expandió rápidamente a las localidades madrileñas de Cadalso de los Vidrios, Cenicientos y Las Rozas de Puerto Real.