Los responsables de la unidad de los Mossos d'Esquadra que investigó el expolio del Palau de la Música han explicado este miércoles como testigos en el juicio que el expresidente de la institución Fèlix Millet guardaba en una caja de seguridad de una entidad bancaria 1,8 millones de euros en billetes de 500.

Dos mandos policiales (los primeros testigos que han declarado en el juicio) han explicado que, al irrumpir en el Palau para registrarlo en julio de 2009, descubrieron documentos en la caja fuerte de Millet que hacían referencia a esa caja de seguridad que estaba en una sucursal.

Los policías también han ratificado en sus declaraciones que descubrieron que Millet y el que entonces era su mano derecha, Jordi Montull, había falsificado facturas para justificar ante la Agencia Tributaria la salida de miles de euros en efectivo del Palau.

Han explicado que se encargaron de analizar los "movimientos sospechosos" de dinero en el Palau que había denunciado Hacienda, con el cobro de cheques en efectivo de entidades bancarias por valor de miles de euros: un total de 11 cheques que habían salido por ventanilla.

Los máximos responsables del Palau, ante la reclamación de Hacienda, se apresuraron a justificar estas salidas con facturas de cuatro empresas, que resultaron ser falsas, y con la compra de un local por parte de la institución.

Renuncia a Roca

De otro lado, Millet ha renunciado a que comparezca como testigo el ponente de la Constitución y abogado Miquel Roca, que de esta forma se librará de testificar ante la Audiencia de Barcelona en el juicio por el expolio de la institución cultural. En el juicio por el expolio del Palau, que se prolongará hasta finales de junio, también se ha acordado hoy, a instancias de las partes, la renuncia de otros cinco testigos de carácter técnico. 

Según ha anunciado la presidenta del tribunal, Montserrat Comas d'Argemir, la defensa de Millet, ejercida por el abogado Abraham Castro, ha renunciado a la testifical de Roca, que estaba fijada para el próximo 21 de abril, por lo que, como ninguna otra parte la había solicitado, ha quedado definitivamente descartada.

Además, el tribunal del caso Palau ha acordado dispensar de la obligación de acudir al resto de las sesiones del juicio a dos acusados, directivos de empresas proveedoras de CDC, que incriminaron al partido al asegurar que efectuaron facturas mendaces para desviar fondos de la institución cultural. Se trata de los exresponsables de Altraforma (empresa de publicidad) Miguel Giménez Salinas y de Hispart (dedicada al montaje de sistemas audiovisuales para congresos, convenciones y mítines) Juan Manuel Parra.

Los dos acusados, que afrontan una petición fiscal de tres años de cárcel por un delito menos grave de falsedad documental, admitieron el pasado 10 de marzo ante el tribunal que participaron en el desvío de fondos del Palau de la Música a CDC a través de facturas mendaces.

En concreto, los dos acusados confirmaron la tesis de la Fiscalía y reconocieron que fue la propia CDC quien les dirigía al Palau de la Música para cobrar por los servicios que habían prestado al partido.

Miguel Giménez Salinas reconoció que entre 2006 y 2007 cargó al Palau de la Música tres facturas por un valor de 190.778 euros con los conceptos falsificados, dado que en realidad correspondían a servicios que había prestado a CDC. Y Juan Manuel Parra admitió que cargó al Palau trece facturas con un valor de 824.299 euros que en realidad correspondían a servicios prestados a CDC con motivo de las elecciones generales de 2004.